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efe / zaragoza
El Zaragoza salió del descenso gracias a su victoria sobre el Sevilla, en un partido en el que el conjunto aragonés dio, por fin, una buena imagen y los de Manolo Jiménez pagaron el peaje de la Copa, al reservar jugadores.
Es verdad que Jiménez se guardó a una gran parte de sus titulares pensando en el envite de la próxima semana contra el Getafe, pero si se tiene en cuenta la amplitud de plantilla de los de Nervión y que el Zaragoza está con el agua al cuello, el equipo maño ha dado razones a sus seguidores para pensar en que la salvación es posible.
Ya de inicio, el cuadro visitante fue el primero en meter miedo al nuevo Zaragoza con un remate del argentino Aldo Duscher tras saque de esquina, que Ander Herrera despejó sobre la línea de gol.
Sin embargo, los temores del pasado parecían haber quedado atrás y, lejos de asustarse, el equipo maño fue a por el partido decididamente con una fuerte presión defensiva y velocidad en el manejo del balón y en el ataque.
Colunga fue el primero en avisar al Sevilla y, tras una buena jugada en la que la defensa sevillista despejó cuando estaba a punto de rematar, llegó la mejor ocasión del asturiano, cuando dribló a Andrés Palop e hizo lo más complicado, tirarla fuera con toda la portería libre.
Arizmendi lo intentó 10 minutos después y, en plena efervescencia zaragocista, otro de los nuevos, el italiano Mateo Contini, aprovechó un barullo en el área tras un córner para adelantar a su equipo en el minuto 31.
la fortuna de su lado. Poco le duró la alegría al conjunto de Aurelio Gay, porque una salida mal medida de Carrizo le costó el empate apenas tres minutos más tarde, con un tanto de Kanouté, aunque la fortuna sonrió a los propietarios del terreno cuando, ya cerca del final de este tiempo, Negredo marcó en propia puerta en un saque de esquina.
Con la desventaja del marcador, el equipo hispalense inició el segundo periodo dominando el juego ante un rival que buscaba las contras en velocidad.
A pesar de la intensidad de los dos equipos, y contrariamente a lo ocurrido en los primeros 45 minutos, ninguno de los contendientes fue capaz de llegar al área con claridad. Jiménez puso a toda su artillería en juego tras el descanso (Perotti, Renato y Navas) pero el equipo local aguantó bien las embestidas de los andaluces, que acabaron con nueve jugadores por las expulsiones de Negredo y de Stankevicius y que suman su tercera salida lejos con derrota, y se hizo con una victoria muy importante, tanto desde el punto de vista de la clasificación como anímicamente.
