El Real Madrid se impuso ayer al Power Electronics Valencia en el tercer partido de la serie de cuartos de final de la Euroliga, con lo que se adelantó por 2-1 en la eliminatoria y podría sentenciar su clasificación para la deseada Final Four mañana, en un duelo que también se celebrará en la capital del Turia.
El conjunto local dominó durante casi todo el encuentro, pero se hundió en el último cuarto. El ‘resurgir’ del pívot blanco Fischer, autor de 19 puntos, resultó fundamental para que los visitantes dieran la vuelta al marcador.
En la primera mitad, eso sí, el Real Madrid tuvo muchos problemas a la hora de conseguir posiciones de tiro cómodas. El Power Electronics se exprimió en defensa y pudo mantener durante los 20 minutos iniciales una gran intensidad bajo los aros. De cualquier modo, su renta al descanso era de apenas tres puntos, por lo que la emoción continuaba presidiendo la contienda.
Los problemas para los de Svetislav Pesic comenzaron en el tercer parcial, pero se las arreglaron para mantenerse por delante de los contrincantes.
Los auténticos apuros de los levantinos se produjeron en los 10 minutos postreros. En ese período, el conjunto dirigido por Emanuele Molin pasó a dominar en todas las facetas y, de hecho, acabó llevándose la victoria sin apuros.
El Power Electronics no tira la toalla todavía, pero sabe que una derrota más en el cruce terminaría con su sueño de disputar la Final Four.
Otro resultado
Montepaschi-Olympiacos 81-72 (2-1)
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San Antonio-Portland 92-100
