El Club Deportivo Quintanar sumó un buen punto en casa de uno de los mejores equipos del Grupo, el Santa Marta, que aspira al ascenso a División de Honor. Un empate a cero que da muestras de lo igualado que estuvo un partido en el que, en la primera parte, los segovianos jugaron los mejores minutos de esta temporada, muy bien plantados ante un extraordinario rival en el que la mayoría de sus jugadores eran juveniles de segundo año.
Pero el ritmo tan alto impuesto en la primera mitad hizo mella en el Quintanar, que se vio encerrado en su campo tras el descanso, si bien las dos ocasiones más claras fueron suyas, al contragolpe, con un disparo al palo y otro tiro bien despejado por el portero.
Incluso, justo antes de que el árbitro pitara el final del partido, un jugador segoviano se marchó solo ante el guardameta. Pero no hubo tiempo para más.