La mala puntería del Quintanar está acabando por complicarle la vida al conjunto segoviano dentro de la Nacional Juvenil. El equipo que entrena Nacho Martín trata siempre de jugar al fútbol, domina con el balón y es capaz de generar varias ocasiones claras de gol por partido, pero a la hora de culminar las oportunidades no hay acierto, y el equipo acaba pagando esa falta de tino rematador con la pérdida de puntos.
En la tarde de ayer el Quintanar se midió a la Ponferradina, equipo con el que los segovianos competirán por una plaza en mitad de la tabla, y tanto segovianos como leoneses dejaron claro que con el fútbol que practican tienen muchas opciones de lograr la permanencia, pero también evidenciaron un gran desacierto rematador a la hora de culminar las ocasiones que tuvieron en buen número, tanto en la primera parte, en la que los amarillos buscaron el gol con su juego de toque mientras que los ponferradinos lo hacían con diagonales buscando la espalda a la defensa, como en el segundo período, en el que el conjunto visitante puso más intensidad que el local en todas sus acciones, pasando de dominado a dominador.
Los porteros fueron los grandes protagonistas del partido, ya que tanto Roberto en la portería segoviana, como Pablo en la de la Ponferradina, tuvieron intervenciones de mérito. Pero en el tiempo de descuento, y después de que David fallara dos ocasiones clamorosas para hacer el 1-0, un contragolpe de la Ponferradina acabó convirtiéndose en el definitivo 0-1.