El verano multiplica el número de coches en las carreteras. Llegan las vacaciones y los viajes son la tónica general: a la playa, a la montaña, al pueblo… Cualquier sitio es bueno para descansar unos días, desconectar del trabajo y disfrutar.
Pero para ello, primero, hay que llegar al lugar de destino y hacerlo con seguridad. Planificar el viaje y revisar el coche antes de salir a la carretera son acciones imprescindibles para evitar, en la medida
de lo posible, los accidentes que pueden amargar las tan deseadas vacaciones.
Y es que, en lo que va de año, seis personas han perdido ya la vida en las carreteras segovianas en múltiples accidentes que han dejado también más de una docena de heridos de diversa consideración. Siniestros diversos que ponen de relevancia la importancia de no despistarse al volante.
El peor accidente tuvo lugar en El Espinar el sábado 28 de mayo. Pasadas las tres de la tarde, el Servicio de Emergencias Castilla y León 112 recibió una llamada informado de una colisión múltiple en el kilómetro 69 de la N-VI, a la altura de la localidad de El Espinar, en sentido Madrid. Ya advertía el alertante que había seis vehículos implicados en la colisión y que al menos cinco personas estaban heridas. Además, una de las víctimas había quedado atrapada en uno de los coches
accidentados.
Según informó el Servicio 112 y confirmó posteriormente la Guardia Civil de Tráfico, en el lugar del accidente los efectivos desplazados confirmaron el fallecimiento de una mujer, R.C.P., de 90 años.
El resto de los heridos fueron atendidos de urgencia y evacuados del lugar del suceso. Dos hombres, de 29 y 31 años, A.G.M y J.A.M.B., y dos mujeres, de 32 y 45 años, M.T.H.F. y M.C.G.D., fueron trasladados al Complejo Asistencial de Segovia; mientras que otro varón, de 82 años, M.C.P, como presentaba un estado más grave, fue evacuado a Madrid en UVI móvil, aunque nada pudo hacerse por salvar su vida y falleció incluso antes de llegar al hospital. Así, la colisión múltiple se saldó con dos ancianos fallecidos y cuatro heridos de diversa consideración.
Pero el primer accidente mortal del año 2016 en las carreteras de Segovia tuvo lugar el lunes 7 de marzo, cuando un varón de 45 años, cuya identidad respondía a las iniciales J.F.F.R, falleció tras colisionar el turismo en el que viajaba contra una pared del túnel de Guadarrama, en la AP-6 sentido Madrid, en el término de El Espinar. El suceso se produjo minutos después de las doce del mediodía y, en el lugar de los hechos, el personal de Sacyl sólo pudo confirmar el fallecimiento de la víctima.
Unos días después, el 31 de marzo, al filo de la medianoche, tuvo lugar otro accidente mortal. En este caso fue en la CL-603, a la altura de San Miguel de Bernuy. El suceso tuvo lugar a las 23.45 horas, en el punto kilométrico 36,500 de dicha vía, en sentido Cantalejo. La primera llamada que se recibió en el Servicio de Emergencias de Castilla y León 112 informaba del vuelco de un tractocamión con remolque y avisaba de que el conductor estaba atrapado en el interior de la cabina.
Hasta el lugar de los hechos se trasladaron efectivos de la Guardia Civil de Tráfico y de los Bomberos de Segovia, así como un equipo del Sacyl, que trasladó una ambulancia de soporte vital básico, una UVI móvil y un equipo médico de Cantalejo. Sin embargo, al llegar al punto del accidente, sólo pudieron confirmar el fallecimiento del conductor.
Se trataba de un hombre de 48 años, informó la Guardia Civil, cuyas iniciales responden a T.L.B. Según relató tras el siniestro el alcalde de San Miguel de Bernuy, José María Bravo, vivía en Guadalajara, estaba casado y tenía una hija de diez años. Se trataba de un conductor autónomo, que había cargado en Uvesa, un matadero de pollos situado en Cuéllar, donde había recogido un cargamento de carne de ave envasada que tenía que llevar a Inglaterra.
Sólo cuatro días después, el 4 de abril, un nuevo suceso mortal tuvo lugar en la provincia, en el término de Castillejo de Mesleón. El Servicio de Emergencias Castilla y León 112 recibió una llamada, a las 16.24 horas, informando del vuelco de un turismo en el kilómetro 107 de la
A-1, en sentido Burgos. El siniestro se saldó con una persona muerta
—un varón de 80 años— y tres heridas de gravedad —otros tres hombres de 70, 72 y 74 años—, que fueron trasladados al Complejo Asistencial de Segovia.
El último accidente mortal registrado hasta el momento fue el pasado 7 de junio y costó la vida a una mujer en la AP-6, a la altura de El Espinar. El siniestro tuvo lugar a las 10.30 horas, cuando el vehículo en el que viajaba la fallecida —una anciana de 83 años, cuyos datos de filiación eran J.A.M.— alcanzó por detrás a un camión de mercancías, según informaron fuentes de la Guardia civil de Tráfico. El conductor del vehículo, un varón de 90 años, cuyo nombre es J.R.R., resultó herido grave, según la Guardia Civil, y tuvo que ser trasladado en UVI móvil al Complejo Asistencial de Segovia.
