Los vecinos del barrio de San Lorenzo esperan cada año la llegada de los tradicionales encierros nocturnos, que suelen reunir a decenas de personas en las inmediaciones de su plaza de toros, lugar donde termina el recorrido taurino.
La tarde de ayer viernes arranacaba con varias actividades deportivas. Primero fue el turno de los juegos de mesa; después, todos pudieron disfrutar de los juegos populares en el Pub Aris. Y casi al final de la tarde, cuando el calor veraniego comenzaba a dar una tregua, se celebraron la primera y segunda semifinal de fútbol vaca.
Las ganas de fiesta llegaron de la mano de la charanga, que durante dos horas trató de sacar a bailar a los asistentes. Amigos, compañeros y conocidos se reunían a las puertas de los bares para tomarse algún refresco y alguna que otra copa. Todo ello para hacer hueco a la fiesta que aún estaba por llegar.
Cuando por fin se hizo de noche, los nervios previos al encierro nocturno hicieron acto de presencia. Son muchos los jóvenes que deciden correrlos de principio a fin; otros en cambio apuestan por entrar directamente a la plaza de toros, a la espera de disfrutar de la llegada del ganado. Y este año, no fue una excepción.
El encierro comenzó con quince minutos de retraso y se desarroló sin incidentes. La manada pronto se disgregó y dos astados tomaron la delantera. Fue rápido y limpio. Como ya es habitual, el encierro nocturno contó con la vigilancia de la Policía Local, que trata de que la jornada se desarrolle con total normalidad. Asimismo, la enfermería y los servicios médicos se dan cita junto a la plaza de toros por si tuvieran que atender a algún herido. Su atención no fue necesaria. Los cuerpos de emergencia y seguridad segovianos ayudan así a que los encierros transmitan tranquilidad a los asistentes. Son estos mismos cuerpos los que, coordinados por el Ayuntamiento, realizan controles de alcoholemia en los principales accesos por carretera al barrio de San Lorenzo.
Después del encierro, las calles de San Lorenzo se llenaron aún más de gente con ganas de celebrar la llegada del fin de semana. La orquesta SMS amenizó la velada desde la media noche y, más tarde, fue el turno de la charanga Jarra y Pedal, que entretuvo a los asistentes durante el descanso de la verbena. En ese mismo momento se hizo la entrega de premios a los tres mejores disfraces.
Hoy, sábado 8 de agosto, los peñistas y no pocos segovianos se disponen a celebrar una vez más una jornada de fiesta. Un concurso de recortes, juegos para niños, música y una recena de madrugada serán algunas de las actividades que están programadas para hoy, a la espera de que el buen tiempo siga acompañando a este barrio con tantos años de tradición festiva.
