El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), José Luis Concepción, aseguró en Burgos que el Gobierno no ha sabido reconocer la labor de los magistrados y ha «desatendido» las necesidades judiciales de la región. A su juicio, el esfuerzo de los magistrados no se ha visto recompensado por parte del Ministerio como «cabía esperar», ya que en 2009 sólo se crearon seis nuevos órganos judiciales, lo que se enmarca en «una política de cuentagotas hacia Castilla y León que se inició hace varios años».
La actitud del Ejecutivo, según Concepción, se opone a la postura «seria, sosegada y comedida» expuesta por la sala de Gobierno del TSJ, órgano que reivindicó la creación de 36 nuevas unidades judiciales, según expuso durante la presentación de la Memoria Judicial de 2009 de alto tribunal.
Concepción reconoció que si el año pasado «las cosas no fueron muy bien, el presente ejercicio 2010 no se presenta con mejores expectativas». Así, explicó que el Ministerio de Justicia prometió para este año siete nuevas plazas y «ha desatendido dos órganos judiciales que eran prioritarios».
El presidente del TSJ también mostró su disconformidad con el Gobierno en materia de infraestructuras judiciales. A pesar de reconocer la labor del Ministerio para recuperar y ampliar el edificio judicial de León, manifestó que se le ha dado mucha «pompa» a una obra cuya inauguración contó con la presencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Otras de las obras de mejora se realizaron en el edificio judicial de Almazán (Soria), al igual que en otros municipios de la región, todas ellos valoradas por Concepción como «obras menores».
Sin embargo, según el máximo responsable del TSJ declaró que Valladolid o Segovia los proyectos se han eternizado o «simplemente no se han convocado»; y en las provincias de Soria, Palencia y Salamanca las iniciativas ejecutadas por el Gobierno han sido «parches que no solucionan nada», e incluso, en algunas ocasiones las obras realizadas han deteriorado la estructura histórica y artística de los edificios como es el caso de Soria y Zamora.
Finalmente, Concepción mostró su preocupación por la sede del TSJ en Burgos, cuyas obras deben acabar en junio de 2011. Dijo que visitó recientemente esta obra y se sorprendió al ver que el proyecto inicial no se ha modificado, es decir, el mismo edificio albergará también la Audiencia Provincial, algo que «no tiene sentido», concluyó.
Los juzgados de Castilla y León registraron 468.146 casos en 2009, una cifra que representa un incremento de su actividad laboral respecto a otros ejercicios, concretamente 50.000 asuntos más que en 2008. Asimismo, aumentó la capacidad resolutiva de los magistrados que resolvieron cerca de 460.000 procedimientos, es decir, 60.000 más que un año antes. Unos números que para Concepción significan que el año pasado fue «duro».
Todos estos datos reflejan que la capacidad resolutoria de los magistrados ha estado a la altura del «hilo de las necesidades». El año pasado dictaron 86.201 sentencias, 16.000 más que en 2008, aumento conseguido con una plantilla judicial que tan sólo aumentó en seis personas.
La crisis económica también se ha hecho notar en el gremio de la justicia ya que aumentó el volumen de registro en las jurisdicciones civil, mercantil y laboral y «fundamentalmente en el ámbito de las ejecuciones».
Por último, Concepción señaló que es la última Memoria que presentará en esta legislatura ya que recordó su intención de concurrir a la reelección en el mes de julio.
