El pantano del Pontón Alto, el principal embalse de abastecimiento a la capital, registraba ayer su mínimo histórico. Con una capacidad de 7,4 hectómetros, las reservas del embalse se situaban ayer en 1,2 hectómetros —frente a los 5,1 del año anterior—, muy lejos de la media de los diez últimos años —4,3—, según datos de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD). En otras palabras, el Pontón esta al 16,21% de su capacidad —frente al 68,91% que registraba el año pasado—; lejos de las reservas hidráulicas de la cuenta del Duero, que están, como media, al 30,7% de su capacidad, según informaron ayer desde el organismo.
El alcalde, Pedro Arahuetes, echo mano de un gran panel conla curva de evolución de las reservas del Pontón desde 2001 para explicar la situación “crítica” que hoy vive el embalse. Solo un dato: en el peor momento de la sequía del año 2007, las reservas en octubre bajaron hasta los 4 hectómetros cúbicos. El nivel actual del Pontón es el mismo que cuando la CHD vació el embalse en enero de 2008.
Arahuetes fue contundente: si no llueve, en cinco o siete días la ciudad dejará de tomar agua del embalse. Otros municipios que también se abastecen del pantano, como Palazuelos, tendrían aún unos días más de margen. Y el hecho de que llueva la próxima semana, como apuntan las previsioens, solo serviría para retrasar unos días la imposibilidad de abastecerse del embalse.
No obstante, el alcalde aclaró que a pesar de que la ciudad deje de tomar agua del Pontón, el abastecimiento está garantizado, gracias al embalse de Puente Alta, en Revenga — al 60% de capacidad— y los acuíferos de Madrona. De hecho, y como ya reveló este diario, para minimizar al máximo el uso del Pontón, el pasado 2 de septiembre, el Ayuntamiento comenzó a tomar agua del embalse de Puente Alta y a realizar el suministro a la capital con las reservas de ambos pantanos. Como quiera que el nivel del Pontón continuó descendiendo en los siguientes días, desde el 7 de septiembre, el Ayuntamiento optó por el bombeo de agua desde los acuíferos de Madrona.
Aún así, Arahuetes dijo que “si no lloviera nada en tres meses Segovia, se quedaría sin abastecimiento de agua” algo que se antoja “prácticamente imposible”. añadió. En otras palabras, con el embalse de Puente Alta y los acuíferos de Madrona, la ciudad tiene reservas de agua para tres meses. En todo caso, el alcalde indicó que si a finales de noviembre persistiera la ausencia de precipitaciones, el Ayuntamiento tomaría medidas para restringir el consumo de agua.

