Con la moral por las nubes después de lograr la segunda victoria liguera ante el Sestao, la Gimnástica Segoviana viaja en la tarde de hoy hasta Alcobendas, donde disputará el encuentro de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa Federación ante el Alcobendas Sport con la necesidad de vencer, o de obtener un empate a dos o más goles, si quiere pasar de ronda y llegar hasta los octavos de final.
Aunque este torneo copero sirva para bastante poco si no llegas hasta las semifinales, ronda en la que ya hay premio económico, la Segoviana ha terminado por coger un cierto cariño a esta competición, en la que vivió las únicas alegrías durante los casi dos meses de derrotas ligueras, tras sus victorias ante Zamora y Arandina. Por lo tanto, la sensación será de bienestar si el equipo pasa de ronda, no en vano simplemente se habrá cumplido con el «trámite» de eliminar a un equipo de categoría inferior, y de un cierto alivio si la Segoviana cae eliminada en Alcobendas, ya que por fin el cuadro gimnástico podrá centrar todos sus esfuerzos en la competición liguera.
El empate a uno del encuentro de ida jugado en La Albuera obliga al plantel dirigido por Paco Maroto a salir a por la victoria, algo que tampoco le va a afectar demasiado a su juego, ya que al conjunto azulgrana no se le da nada bien eso de especular con el marcador. Eso sí, habrá un buen número de cambios con respecto al once que ganó el partido el pasado domingo, y bien pudiera presentarse la Segoviana en el «José Caballero» de Alcobendas con el mismo equipo que una semana antes empató en La Albuera, aunque existen ciertas dudas en el centro de la defensa, en la que podría entrar Pablo, ya que no jugará con el equipo en Bilbao el próximo fin de semana, puesto que es seguro que el Comité de Competición le sancionará por la roja que vio ante el Sestao.
En Segovia se quedan David Durán, Jesús Alonso, Víctor Pérez, Ricardo, Maikel, Fran y Pino, más los lesionados Anel y Roberto, que siguen evolucionando de sus respectivas dolencias, aunque en el caso del arevalense éste no es demasiado optimista con respecto a una inminente recuperación.
