Las obras del Paseo de la Cañada, uno de los proyectos ‘estrella’ de la actual corporación de Carbonero, han concluido en los últimos días, abriéndose la calle definitivamente al público coincidiendo con el fin de semana.
De cerca de 700 metros de longitud, el Paseo de la Cañada enlaza el Paseo Nuevo con la zona deportiva de Carbonero el Mayor, estando llamado a convertirse a corto plazo en una de las calles preferidas para los que desean pasear con tranquilidad por Carbonero, ya que su uso será exclusivamente peatonal, a excepción de los vehículos que necesiten transitar por ella para dirigirse a sus garajes.
En vísperas de la apertura al público del Paseo de la Cañada, el alcalde de Carbonero el Mayor, Tomás Galán (PP), quiso recordar que la calle estaba “intransitable” y requería una rápida recuperación, agregando que, tras las obras, se facilitarán los desplazamientos dentro del casco urbano. “En esta actuación se ha pensado más en las personas que en los coches; por eso se decidió dejar peatonal la calle”, explicó el regidor.
No obstante, el Paseo de la Cañada cuenta con aparcamientos tanto en su inicio como al final. En cuanto a la vía, ha sido adoquinada, instalando además la empresa constructora (Juan Francisco Sánchez), iluminación, bancos, papeleras y árboles.
En la zona más próxima al área deportiva de Carbonero se ha habilitado un parque recreativo, con diversos juegos para niños y espacios con césped.
La actuación en el Paseo de la Cañada ha tenido un presupuesto cercano a los 300.000 euros, financiados por la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial de Segovia.