El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) participa en la recuperación de olmedas y olmos ibéricos singulares situados en las plazas de los pueblos, tras la obtención de siete clones resistentes a la grafiosis. Y es que esta enfermedad foránea ocasionó, en las últimas décadas del siglo pasado, la desaparición de más del 90 por ciento de los olmos de toda España.
Estos clones se han obtenido en el marco del Programa Español de Conservación y Mejora de los olmos ibéricos, desarrollado por el Ministerio de Agricultura durante los últimos 29 años, en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid. Un programa que incluye también los trabajos relacionados con el Ulmus Laevis (olmo temblón), cuya autoctonía se ha podido demostrar gracias a los resultados de las investigaciones desarrolladas.
Para la recuperación de olmos y olmedas, el Ministerio ha donado material para llevar a cabo plantaciones y restauraciones en distintas provincias, entre ellas la de Segovia, donde se desarrollan varias iniciativas. Por ejemplo, la Plaza Mayor de Boceguillas acogió ya la plantación de un olmo resistente a la grafiosis.
Asimismo, el Magrama potencia la plantación de 360 olmos híbridos en plazas y alineaciones de diversos municipios de la provincia, que se irán vigilando para ver su evolución; así como la plantación de un centenar de olmos temblones para la restauración del arroyo de Riofrío.
Resalta el Ministerio de Agricultura que los clones resistentes a la grafiosis fueron incluidos, en enero de 2014, en el Registro Nacional de Materiales de Base y su objetivo es la obtención de réplicas para garantizar su capacidad de resistencia a la enfermedad.
Así, gracias a todos los olmos que se han plantado ya y se seguirán plantando en la provincia, entre otros puntos de España, podrá estudiarse la evolución de los árboles, su restincencia a la grafiosis y otras enfermedades, etcétera, de modo que se recuperen totalmente todas las alamedas arrasadas a finales del siglo pasado.
Estas actuaciones se unen a las presentadas hace unos días por el Ministerio de Agricultura, destinadas a la restauración de las lagunas de Lastras de Cuéllar y Hontalbilla, con un presupuesto estimado de 700.000 euros, con el objetivo de recuperar dichas lagunas, ubicadas en el gran arenal de la Tierra de Pinares, un ecosistema único en el interior peninsular, salpicado de pequeñas lagunas que emergen entre las arenas como pequeños humedales de gran valor ornitológico.
El Magrama considera que estas lagunas precisan de “una inmediata restauración ambiental”, debido al riesgo existente de degradación y pérdida, incluso, del ecosistema.