El Real Madrid solventó ayer a duras penas la visita del Racing, un rival que llegaba agobiado por su situación y agitado por el reciente cambio de técnico, pero que puso en evidencia, sobre todo en la recta final del compromiso, al conjunto del chileno Manuel Pellegrini, que terminó pidiendo la hora.
De nuevo, el capitán Raúl no entró en el once inicial. Ya ha dejado de ser noticia su presencia entre los suplentes, aunque muchos analistas habían pronosticado que contra el bloque de Miguel Ángel Portugal saltaría al campo desde el inicio.
En definitiva, la situación cada vez parece más oscura para él, sobre todo porque vienen choques muy importantes, como el del domingo en el Camp Nou.
En su deseo de realizar rotaciones, el preparador blanco sí contó con otros ‘olvidados’, Esteban Granero, Ezequiel Garay y Royston Drenthe.
A los 10 minutos, Luis García lanzó un aviso con un disparo por encima de Íker Casillas. Los cartuchos de fogueo los empleó el Madrid en sendos tiros de Granero y Xabi Alonso.
Después, el portero de los cántabros se tuvo que emplear a fondo en un lanzamiento del brasileño Kaká desde el vértice del área, lleno de intención.
Una devolución del larguero ante un envío de Álvaro Arbeloa, muy activo y más cómodo en la derecha, evidenció que el Madrid apretaba el acelerador. Tanto, que Gonzalo Higuaín terminó con la resistencia de Toño cuando remató en el área una asistencia de cabeza de Garay.
relajación. El Racing pasó unos minutos de aprietos, y los locales pudieron sentenciar, pero se dieron un respiro, lo que permitió la recuperación visitante.
Un fuera de juego, eso sí, evitó el segundo tanto de la escuadra de Concha Espina. Karim Benzema culminó de tacón una buena acción colectiva, pero la diana no subió al marcador.
Portugal buscó alternativas e introdujo en el césped a Henrique y al joven Sergio Canales. En cuanto a Pellegrini, recurrió a Raúl.
Higuaín tuvo el 2-0 en sus botas, después de que Drenthe ejecutara un sprint fantástico para arrebatar el balón a la zaga. El delantero sudamericano remató sin oposición, pero actuó Toño.
El único tiro entre los tres palos de los de Santander se convirtió en un tanto anulado. Canales consiguió superar a Casillas, pero el árbitro señaló fuera de juego de un compañero.
En definitiva, el Real Madrid asumió demasiados riesgos y, pese a que cosechó los tres puntos, dejó que los visitantes tuvieran una mínima opción hasta el final.
