El Real Madrid cayó derrotado ayer (67-66) ante el Caja Laboral, poniendo así en peligro la segunda posición de la Liga, puesto que los ‘baskonistas’ se sitúan a un triunfo, y distanciándose del Barcelona, que logró el triunfo el domingo frente al CAI Zaragoza.
En un remodelado Fernando Buesa Arena que batió el récord de asistencia a un encuentro ACB, con 15.504 espectadores reunidos para jalear a los suyos, el cuadro vitoriano planteó un partido con mucho oficio para sacar una importante victoria y acercarse así al segundo puesto de la clasificación que ostentan los blancos.
Un triple de Lampe redondeó un fantástico parcial de salida (9-3) favorable a los vascos. Las pérdidas de balón y el buen hacer defensivo local, lastrado con cinco faltas en menos de siete minutos, frenaron en los primeros minutos el caudal ofensivo que caracteriza a los de Pablo Laso.
Con muy malos porcentajes de acierto en canastas de dos puntos, sendos contendientes tuvieron serios problemas para perforar el hierro rival. Si bien, a modo de goteo, los vitorianos fueron ampliando su ventaja en el electrónico ante un Real Madrid que echó de menos a su mejor tirador, Jaycee Carroll, que resultó baja aquejado de una pancreatítis aguda.
Un triple de Velickovic y un espectacular tapón de Mirotic culminaron una cierta mejoría de los blancos, que por primera vez en muchos minutos, se acercaron a los registros del Caja Laboral antes del descanso.
Después del intermedio, una canasta de Llull, un triple de Singler y un ‘dos más uno’ de Begic echaron por tierra todo el trabajo de los pupilos de Ivanovic, permitiendo que diera comienzo un nuevo encuentro.
A partir de ahí, el partido resultó áspero e incómodo de disputar para ambos conjuntos, y con todo por decidir, fueron los bases los que se erigieron protagonistas en el apretado final.
