Desde sus inicios, el proyecto del Centro Ecuestre de Castilla y León en Segovia suscitó no pocas polémicas y controversias acerca de la idoneidad de llevar a cabo una inversión que superó los siete millones de euros para construir uno de los más modernos centros de España en esta actividad deportiva y ganadera. Años más tarde, la gestión de la Federación Hípica de Castilla y León y el trabajo realizado por sus mentores han conseguido situar a Segovia como referencia nacional tanto en el ámbito hípico como en el de la cría caballar merced a la labor del Centro Ecuestre, que en su actual configuración cerrará sus puertas el próximo 1 de julio.
La decisión de la Consejería de Agricultura de retirar la ayuda anual de 270.000 euros a la Federación Hípica que servía para garantizar el funcionamiento del centro y la intención de sacar a licitación pública su gestión ha caído como un jarro de agua fría en los profesionales del sector equino y en los deportistas que a lo largo del año visitan Segovia para participar en las pruebas hípicas y eventos que se organizan en el centro.
Fuentes vinculadas al sector hípico y de la cría caballar consultadas por esta redacción no dudaron en calificar como «despropósito» la medida adoptada por Agricultura, ya que el sistema de gestión utilizado hasta la fecha «se ha demostrado sumamente eficiente, y la propia Consejería reconoció en múltiples ocasiones la gestión satisfactoria de la Federación Regional, que ha permitido que el Centro Ecuestre se haya convertido en una referencia en el mundo del caballo en nuestro país».
La consejería ha anunciado que antes de que finalice este mes estará listo el pliego de condiciones para la licitación del Centro Ecuestre, justificando esta decisión para garantizar la autofinanciación de sus actividades. Para los profesionales del sector, esta opción supondrá el cierre del centro «durante varios meses» hasta que se resuelva la adjudicación, y consideran que la privatización de un centro de estas características no es una buena solución. Así, ponen como ejemplo el centro ecuestre creado en Oviedo por el Ayuntamiento y actualmente en desuso después de una fallida experiencia privada en su gestión.
Los expertos consultados aseguran que la gestión actual del centro ha garantizado la actividad hípica y de promoción equina, celebrándose más de 40 eventos de esta índole, así como siete campeonatos de carácter nacional y los concursos morfológicos básicos para el avance del sector equino. Además, los cursos en la Escuela de Capacitación Agraria centrados en el mundo del caballo han formado a más de 900 profesionales, lo que ha hecho que muchos de ellos hayan encontrado empleo en un sector floreciente en el ámbito ganadero.
Todo ello ha supuesto que desde su creación, el centro ha generado un impacto económico anual superior a los seis millones de euros, que el nuevo modelo de gestión pone ahora en peligro de que lleguen a la economía provincial.
