Pese a las ‘irregularidades’ urbanísticas y administrativas, las obras de la segunda fase del complejo deportivo han proseguido sin interrupción, de manera que, a día de hoy, «están muy avanzadas», según dijo ayer el concejal de Urbanismo, Alfonso Reguera. En la hipótesis de que el Consejo Consultivo de Castilla y León de su visto bueno al expediente de recalificación de la parcela, con los informes favorables de la Junta y el Ayuntamiento, el pleno municipal podría aprobar definitivamente la ‘legalización’ en el mes de julio. Con anterioridad, el Ayuntamiento, a través del Instituto Municipal de Deportes (IMD), con el asesoramiento de los servicios jurídicos municipales, debería subsanar la anulación del concurso de adjudicación de las obras y explotación del complejo ordenada por los tribunales. «Lo abriremos cuanto esté todo legalizado», advirtió ayer Reguera, que, en todo caso, y tras destacar la ‘buena sintonía’ que existe con la empresa adjudicataria, calcula el inicio de la actividad del complejo deportivo para el mes de septiembre. entre otros servicios, incluye dos piscinas climatizadas y salas para la práctica de actividades saludables y deportivas. La adjudicataria, «Segovia Sport», asumió el compromiso de invertir 4.249.749 euros para materializar el proyecto, a cambio de obtener la cesión de los terrenos y la explotación de las instalaciones por un periodo de 40 años. Con la firma del contrato, el Ayuntamiento se comprometió a pagar a la empresa un total de 6.008.000 euros a lo largo de estos 40 años, a través subvenciones anuales de 152.000 euros.