Las Fuerzas Aéreas iraquíes atacaron ayer el convoy del líder del Estado Islámico, Abú Bakr al Baghdadi, en el oeste de la provincia de Anbar. Según informó posteriormente el Ejército iraquí y así constaba al cierre de esta edición, se desconoce el paradero actual de Al Baghdad. También según esta nota, “las fuerzas aéreas iraquíes bombardearon el convoy del terrorista cuando se dirigía hacia Kerabla para asistir a una reunión con comandantes del Daesh”, acrónimo en árabe de Estado Islámico.
“El lugar del encuentro también fue bombardeado y muchos de los líderes resultaron muertos o heridos”, apuntó el Ejército. Sin embargo, nada se sabe sobre la situación del “asesino Al Baghdadi”, que supuestamente fue evacuado en otro vehículo. Al Baghdadi es el líder del grupo yihadista Estado Islámico, que controla amplios territorios del noroeste de Irak y del este de Siria y que desde hace unos meses ha puesto en jaque a los regímenes de Bagdad y Damasco. Los movimientos y la situación exacta del líder yihadista han sido motivo constante de especulación.
Diversas fuentes han informado en numerosas ocasiones de supuestos ataques contra Al Baghdadi o su entorno. Hasta ahora, el golpe más duro contra la milicia que se ha confirmado oficialmente es la muerte de su ‘número dos’, Haji Mutazz, por un ataque aéreo perpetrado por las fuerzas iraquíes en agosto.
Por otra parte, varios medios iraquíes informaron de la muerte del líder del Estado Islámico, Abú Bakr al Baghdadi, un extremo que no ha podido ser confirmado todavía por medios oficiales. Medios como ‘Al Soraya’ y ‘Al Anba’ informaron citando fuentes militares de que nadie pudo sobrevivir al ataque, por lo que el califa Al Baghdadi estaría muerto, según recogió la agencia de noticias iraní Fars.
El ataque fue realizado por una unidad especial de las Fuerzas Aéreas conocida como los Halcones, con experiencia en operaciones anteriores contra dirigentes del Estado Islámico. En él habrían muerto además varios dirigentes yihadistas como Abú Hareth al Shami, Abu Aeshe al Ansari, el marroquí Abú Yusef al Jezraui, Abú Husein al Salmani —encargado del sistema de recaudación fiscal islámico— o Wad al Latif Yomé al Mohamadi, responsable de las operaciones suicidas del Estado Islámico.
Otros medios árabes revelaron que en el ataque contra el convoy de Al Baghdadi participó el centro de intercambio de información entre Irán, Rusia, Siria e Irak con sede en Bagdad. La versión oficial fue difundida en un comunicado por el Ejército iraquí y en ella no informaron sobre la situación de Al Baghdadi. “La Fuerza Aérea iraquí ha bombardeado el convoy del terrorista Abú Bakr al Baghdadi cuando se dirigía a Al Karable”, explicaron.
