El vicepresidente yemení, Abderabu Mansur Hadi, llegó ayer a un acuerdo con el jefe tribal opositor Sadeq al Ahmar para un alto el fuego en los combates que tienen lugar en Saná desde hace dos semanas, según testigos de la oposición.
Fuentes de la plataforma opositora Encuentro Compartido señalaron que Al Ahmar, jefe de la tribu Hashed, aceptó una propuesta de Hadi, que asumió el sábado el poder temporalmente después de que el presidente Alí Abdalá Saleh viajara a Arabia Saudí para ser operado de las heridas sufridas en un atentado el viernes pasado en su palacio presidencial. Un ataque del que el Ejército yemení aseguró que «Al Qaeda está detrás del terrible bombardeo».
Por su parte, una fuente próxima Al Ahmar explicó que el acuerdo incluye, concretamente, la retirada de las fuerzas de seguridad del barrio de Hasaba, lugar de residencia del jefe tribal.
El conflicto armado estalló el pasado 23 de mayo después de que Saleh rechazara por tercera vez firmar una iniciativa presentada por los países del golfo Pérsico para un cambio del poder.
Precisamente esa propuesta del Consejo de Cooperación estipulaba que el poder sería transferido a Hadi en el plazo de un mes tras su firma, y dos meses después habría elecciones parlamentarias y presidenciales, pero Saleh nunca llegó a rubricarla.
Y mientras llega esa tregua, la violencia en las calles sigue sacudiendo un día más Yemen. El foco de atención se trasladó hasta Arabia Saudí, donde se encuentra el presidente Alí Abdalá Saleh. Según una fuente sanitaria, el mandatario ya sometió a una cirugía para extraerle metralla del pecho en un hospital militar. También, tendrá un tratamiento de cirugía plástica para sus heridas del rostro.
Pero las muertes continúan en varias ciudades del país asiático. Así, lo atestiguan los dos soldados fallecidos ayer por una explosión en un edificio en el que se encontraban milicianos fieles al jeque opositor Sadeq Abdalá al Ahmar, en Saná, según fuentes policiales y militares.
El complejo se encuentra cerca de la plaza Al Tagir, donde miles de opositores al régimen yemení continúan gritando, cada día, lemas en contrarios del presidente Ali Abdalá Saleh.
Asimismo, las fuentes precisaron que se reanudaron los enfrentamientos alrededor del complejo residencial de Al Ahmar, en el barrio de Hasaba, entre fuerzas de seguridad y hombres armados de la tribu de Al Ahmar, a pesar del alto el fuego conseguido entre ambas partes.
A esto hay que sumar las cinco personas que murieron ayer en la ciudad de Taiz por los múltiples combates que se desarrollaron a lo largo de la jornada.
Más cerca de España
Por su parte y ante los últimos acontecimientos, el embajador de España en Yemen, Francisco Javier Hergueta, y una veintena de españoles abandonaron ayer el país a bordo de un vuelo comercial que les llevó a Ammán, la capital de Jordania, y de allí volarán a Madrid.
Entre los nacionales que integran la delegación, hay trece que pertenecen al servicio de la embajada, entre ellos, varios policías. El resto son, en su mayoría, personal cooperantes.
