Dimisión de su cargo y renuncia a formar parte de las listas del PSOE. Esto es lo que el PP exigió ayer al ministro de Fomento, José Blanco, después de que un periódico nacional publicara que el empresario lucense Jorge Dorribo, imputado en la Operación Campeón, asegurara que pagó 200.000 euros al primo del dirigente socialista para entrevistarse con él. Mientras los populares aseguraron que la situación del dirigente es «insostenible», el propio ministro subrayó que es «falso» que existiera tal pago, por lo que confía en que «va a prevalecer la verdad sobre la mentira».
Los conservadores volvieron a pedir «explicaciones pormenorizadas» al socialista por su implicación en esta trama que, según el partido liderado por Mariano Rajoy, «cada vez es más contundente contra su gestión». «Tiene que dimitir de ministro y apartarse de las listas», aseveró el portavoz de Fomento del PP, Andrés Ayala.
El dirigente sostuvo que «el socialista tiene que comparecer ante la Diputación Permanente del Congreso a petición propia y explicar todas sus actuaciones, como ministro y como candidato». Según explicó, se ha dado «un crecimiento inexplicable e incomprensible de determinadas empresas gallegas en subcontrataciones del Ministerio de Fomento, muy sospechoso en tiempo de crisis, con empresas que han crecido un 658 por ciento anualmente en la etapa de Blanco.
Sin embargo, el ministro se defendió, una vez más, y aseguró que es «falso» que Dorribo pagase a su primo Manuel Bran, por lo que insistió en que confía «plenamente» en la «acción de la Justicia», ya que «quedará probado que es falso».
«Lo vengo diciendo desde que se dijo esto. Es una falsedad y, cuando pueda, emprenderé acciones judiciales contra aquellos que difamaron y que lo único que tratan es implicarme en un asunto a partir de la falsedad», subrayó el gallego.
Tras insistir en que no hablará más sobre este asunto, José Blanco comentó que desconoce las «razones» que tiene el empresario «para hacer estas acusaciones falsas». «No debemos olvidar que quien realiza estas afirmaciones es una persona que estuvo detenida y encarcelada precisamente por falsedades y fraude», recordó.
Quien también se refirió a Blanco por las nuevas informaciones fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que aseguró que si el jefe de Fomento hubiera sido un ministro de su formación, el PSOE no habría consentido que fuera candidato a las elecciones generales.
Durante su intervención en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional en Santiago de Compostela, la dirigente popular se preguntó «qué no hubieran dicho» los socialistas «si la situación fuese la contraria», es decir, que si estuviera gobernando el PP y se publicaran con indicios de veracidad ciertas cuestiones referidas a un ministro de ese Gobierno.
A juicio de Cospedal, las críticas y las presiones del PSOE habrían impedido que ese político se presentara a los comicios, es decir, precisó que si Blanco fuera del PP, el PSOE no habría consentido que concurriera a las elecciones.
También pronunció unas palabras el anfitrión, el presidente de la Xunta , Alberto Núñez Feijoo, quien se refirió al ministro de Fomento al afirmar que el político socialista era un «candidato con ciertas dudas».
En cuanto al caso del exdiputado popular Javier Escribano, que dimitió este sábado por estar inmerso en un procedimiento judicial que lo vincula con un supuesto delito de cohecho, Feijóo subrayó que es a la Justicia a la que corresponde pronunciarse sobre el mismo y añadió que su partido ya actuó «contundentemente».
«Creo que dijimos todo lo que había que decir, sentenció el jefe del Ejecutivo gallego. A preguntas de los medios, agregó que «lo que está claro» es que hay «otros» que, si militasen en el PP, «no serían diputados en este momento ni irían en ninguna lista», en velada referencia a Blanco.
