El Palace of Auburn Hills de Detroit fue escenario de una de las derrotas más sorprendentes encajadas esta temporada por Memphis Grizzlies (105-95), que dejaron escapar una renta de 15 puntos al descanso frente a unos Pistons teóricamente desahuciados que resucitaron de la mano de Reggie Jackson.
Marc Gasol sumó un nuevo ‘doble-doble’ con 17 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias en 30 minutos sobre el parqué, en unos Grizzlies que contaron con el liderazgo anotador de Jeff Green (21 puntos). De la mano de ambos jugadores y con una buena defensa, Memphis encarriló el partido alcanzando el ecuador con una cómoda renta (39-54).
Sin embargo, el equipo de Tennessee pagó caro el exceso de confianza frente a un rival que venía de encadenar diez derrotas consecutivas. Con el gran ‘doble-doble’ de Reggie Jackson (24 puntos, 20 asistencias) y la anotación de Kentavious Caldwell-Pope (24), Detroit fue labrándose la remontada e incluso pudo disputar un cómodo final de partido con la victoria asegurada.
“Dejamos de defender y Reggie lo aprovechó. Es muy decepcionante, tenemos que ser más intensos”, lamentó Zach Randolph, que estuvo lejos de su mejor versión (13 puntos, 5 rebotes) ante un batallador Andre Drummond (16 puntos, 16 rebotes) que comandó el juego interior local.
Pese a este inesperado tropiezo, los Grizzlies se mantienen cómodamente instalados en el segundo puesto de la Conferencia Oeste, con tres victorias de ventaja sobre Portland Trail Blazers. Este viernes, intentarán mejorar sus prestaciones ante un rival directo como Dallas Mavericks.
El pívot hispano-congoleño Serge Ibaka pasó por el quirófano para someterse a una artroscopia en la rodilla derecha y estará unas seis semanas de baja, por lo que podría no volver a jugar esta temporada.
