El conflicto que ha surgido en el seno del CD La Granja entre su técnico, Manuel Retamero, y el presidente del Club, Pablo Alejandro, vivió en la jornada de ayer un nuevo capítulo cuando apareció en escena el Comité de Entrenadores que, con la mejor intención de reconducir el tema y poder llegar a un entendimiento, por medio de Andrés Peiro, delegado provincial del citado Comité, se puso en contacto con presidente y entrenador para conocer de primera mano sus impresiones.
En declaraciones a esta Redacción, Andrés Peiro no quiso en ningún momento entrar en disquisiciones sobre quién tenía más razón en el conflicto, sino que hizo un análisis muy somero (pero también muy claro) de los hechos, “ya que hay un contrato federativo que se está cumpliendo al cien por cien, y después hay un acuerdo verbal entre el entrenador y los directivos, que es el de la discrepancia, y sobre el que no puedo opinar, porque se sale del ámbito federativo”.
La intención del delegado provincial es la de poder encauzar la situación para que nadie salga perjudicado, y el equipo no se resienta “después de hacer una temporada extraordinaria”. Precisamente el equipo ya ha mostrado, por medio de su capitán, su intención de aislarse completamente de este conflicto, “ya que hemos hablado entre nosotros, y decidido mantenernos totalmente al margen. Nos jugamos hacer historia vistiendo la camiseta de este club, y no queremos pensar en otra cosa que no sea el partido del próximo sábado”, señaló Pluma, quien alabó el compromiso de la totalidad de la plantilla, “porque todos, incluso los que económicamente lo están pasando mal, se han comprometido a venir a los entrenamientos”.
