El campus María Zambrano, las nuevas instalaciones de la Universidad de Valladolid (UVa) en el antiguo Regimiento, ya tiene la licencia de primer uso municipal, lo que permitirá comenzar con normalidad el nuevo curso académico dentro de unas semanas, según tenían previsto los responsables académicos.
El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, explicó ayer que se ha concedido la licencia de primer uso, una vez que la universidad ha acometido “ciertos trabajos de urbanización que quedaban pendientes” y que habían impedido la concesión hasta el momento. Concretamente, faltaban determinados remates en aceras y mobiliario urbano de la zona.
El alcalde matizó que la UVa tendrá que presentar un nuevo estudio de detalle en el que se recoja el trazado definitivo y la alineación de aceras y viales respecto a la construcción completa del campus, aunque, para no demorar más la licencia, se permitirá a la universidad presentar el documento antes del comienzo de la segunda fase de las obras.
Mientras tanto la UVa, que este año por primera vez ha cerrado por unos días sus instalaciones durante el verano, ultima los preparativos para inaugurar el nuevo campus en septiembre. Uno de los últimos trabajos ha sido el traslado de los 40.000 libros que, junto a revistas y material audiovisual, integran los fondos bibliográficos de los centros de la Universidad de Valladolid en Segovia y que han sido trasladados durante el mes de julio desde el Palacio de Mansilla y la Escuela de Magisterio hasta la nueva sede académica.
Para entonces, se espera un incremento en el número de estudiantes, puesto que el campus María Zambrano ha experimentado un “fuerte incremento” del número de preinscritos con respecto al anterior verano, según confirmó, visiblemente satisfecho, su vicerrector, José Vicente Álvarez Bravo.
