La Supercopa de España, primera batalla de una temporada en la que Barcelona y Real Madrid parecen destinados a pelear por todos los títulos, se decide hoy en el Camp Nou a una hora poco habitual, las 23,00 horas, con los hombres de Pep Guardiola confiados en rescatar su verdadera imagen ante su afición y hacer bueno el 2-2 de la ida que obliga a atacar al bloque de José Mourinho.
El conjunto catalán intentará sumar su décima Supercopa de España, y la tercera consecutiva, y mantener su hegemonía en el fútbol nacional, además de romper otra estadística, la que dice que nunca ha ganado este título en una final contra el eterno rival.
A favor, cuenta con el resultado logrado en el Bernabéu y un Camp Nou que estará lleno hasta la bandera de turistas y aficionados ‘culés’ no habituales, ya que el duelo es de pago para los socios y muchos están fuera de la ciudad catalana por vacaciones.
La posibilidad de ver el debut del chileno Alexis Sánchez y el retorno del hijo pródigo del barcelonismo, Cesc Fábregas tras su etapa en el Arsenal, son dos alicientes que hay que añadir a la visita del Real Madrid y al hecho de que hay un título en juego.
Alexis, que tuvo un rendimiento notable en su primer envite como azulgrana, probablemente repita en el once inicial, mientras que Cesc, que en su primer entrenamiento demostró que está a punto, tendrá que esperar su oportunidad desde el banquillo.
Guardiola espera un Real Madrid más conservador que el de la ida, un rival que renuncie a disputarle la posesión y que opte por esperar más atrás, y por eso apostará por un equipo más ‘tocador’ del que jugó en Chamartín.
En este sentido se antoja clave la vuelta de Busquets al pivote defensivo, una vez ha superado el golpe en la zona costal que le impidió ejercitarse con normalidad los últimos días, y la presencia de Xavi, que podría sentar a Thiago.
La tercera novedad en la alineación local podría ser la de Gerard Piqué, suplente en el coliseo ‘merengue’, como pareja de Eric Abidal en el eje de la zaga, en detrimento de Javier Mascherano.
A por todas
Mientras, el Real Madrid llega a la Ciudad Condal dejando atrás la frustración de sentirse superior en un partido al Barça y no conseguir derrotarle. El paso de las horas ha hecho ver a los futbolistas blancos que son capaces de plantar cara con sus mismas armas al actual campeón de Liga y Champions.
La necesidad de un empate superior a dos goles o ganar impide especular a Mourinho. El técnico pasó del trivote defensivo al tridente ofensivo en el primer duelo del año ante su gran rival, y hoy realizará algunos retoques sin tocar mucho la filosofía con la que se identifican sus buques insignias.
Descartada la presencia de Pepe en el centro del campo, el cambio principal que el entrenador luso puede introducir en el once es la entrada de Coentrao por Di María. Más músculo en la medular para no tocar el tridente que actuará en la punta de ataque formado por Özil, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema.
Además, el atacante luso está a un gol de conseguir el centenar vistiendo la elástica madridista. Se quedó con ganas de hacerlo ante su afición en el Santiago Bernabéu y confía en lograrlo en el Camp Nou para, como ocurrió en la pasada final de la Copa del Rey, guiar a su equipo hacia un nuevo título. Sería la novena Supercopa e igualaría al Barcelona como equipo que más veces la ha conquistado en su historial.
