Más de cien días después de que un torrente de emociones recorriera las almas de los seguidores del Caja Segovia en su eliminatoria de cuartos de final ante Inter Movistar en Alcalá de Henares, el conjunto segoviano retorna a la máxima competición dentro de la Liga Nacional de Fútbol Sala. Han sido más de tres meses en los que las malas noticias (sobre todo económicas) han primado sobre las buenas en el club, como ha sucedido en el ochenta por ciento de los equipos del fútbol sala nacional. Pero finalmente el Caja ha podido ir sorteando las andanadas de la crisis hasta llegar al inicio de Liga con un grupo compacto en el que si hay una figura que destaca sobre el resto, esa es la del nuevo inquilino del banquillo.
Jesús Velasco, que tiene las ideas muy claras aunque con buen criterio prefiera pecar de cauto antes que ir de arriesgado en sus declaraciones, es consciente de que la plantilla ha perdido jugadores de peso específico con respecto al año pasado, pero a cambio el club le ha dado un grupo de jugadores con un extraordinario margen de mejora y muy receptivo a asimilar los novedosos sistemas. Otra cosa es que haya dado tiempo a automatizar los nuevos movimientos tanto defensivos como ofensivos, que posiblemente aún no, aunque resulta indudable que el Caja parte con una ventaja, como es que su columna vertebral se conoce más que de sobra.
También se conoce de sobra la plantilla del Marfil Santa Coloma, que ha recuperado a tres ilustres del fútbol sala para sus filas. Óscar Redondo, Rafa Muñoz, y sobre todo Dani Salgado completarán un equipo que ha sorprendido a propios y extraños en pretemporada, ganando diez de los once partidos que ha disputado, y que por ello ha aumentado sus expectativas. De quedarse conforme con alcanzar la permanencia, el equipo que ahora entrena “Juanito” en sustitución de Padú ha pasado a marcarse la entrada en la copa y los play off como objetivo, y además cuenta a su favor con una afición que crea un gran ambiente en los partidos de casa, metiendo mucha presión tanto a los jugadores rivales como a los árbitros.
El Caja viaja en la mañana de hoy hasta Barcelona en AVE, y volverá inmediatamente después del partido. Esa es la razón por la que el Marfil ha accedido a adelantar en una hora el comienzo del partido, que será a las cinco y media de la tarde. Jesús Velasco no podrá contar para el encuentro ni con Arrivi ni con Jesús, ambos recuperándose de sus lesiones de rodilla y tobillo respectivamente, y para suplirlas ha tirado de la cantera, convocando a Mordi y a Cuqui, que han hecho toda la pretemporada con el primer equipo.
La primera jornada de competición siempre es proclive a las sorpresas, y aunque el Caja tiene capacidad para lograr la victoria en cualquier cancha, lograr los tres puntos en Santa Coloma, algo que el equipo no ha conseguido desde la campaña 2001/02, sería todo un logro.