El Barcelona encontró ayer consuelo ante el CSKA Moscú en la final de consolación de la ‘Final Four’ de la Euroliga, donde los de Xavi Pascual se hicieron con el tercer puesto del continente gracias a un trabajado partido en el que contaron con el liderazgo del capitán, Juan Carlos Navarro (20 puntos).
Tras la humillación en semifinales ante el Real Madrid, el conjunto ‘culé’ sacó el orgullo para doblegar con autoridad al equipo ruso, que también llegaba dolido por su derrota ‘in extremis’ ante el Maccabi Electra. Los catalanes se despidieron de Europa con victoria, ante el mismo equipo que les dejó sin esa sensación en el tercer y cuarto puesto de 2013.
A partir de un primer cuarto igualado (21-24), el Barça comenzó a tomar las riendas del encuentro con la aparición de la ‘Bomba’ y Lampe, que terminó con 17 puntos. El dominio bajo los aros y la tremenda eficacia del capitán, que terminó batiendo el récord de triples en la historia de la ‘Final Four’ (31), catapultó a los de Xavi Pascual.
El festival desde el perímetro de Navarro siguió tras el descanso. Mandando en el marcador, el Barcelona se encontró cómodo sobre el parqué italiano y dominó el partido durante la segunda mitad. La presencia de Dorsey en defensa y la dirección de Huertas permitieron un final tranquilo para los azulgranas.
