Camuflado en el orden del día como una “modificación presupuestaria mediante suplemento de crédito” llega hoy al pleno ordinario de octubre lo que posiblemente sea el desbloqueo que sufren desde hace años las obras del CAT, el Centro de las Artes y la Tecnología de Segovia. Y es que el equipo de Gobierno ha decidido devolver al Ministerio de Industria la parte no ejecutada del préstamo recibido para la construcción del edificio y financiar las obras con recursos propios, según anunció ayer la alcaldesa, Clara Luquero.
Recordó, asimismo, que el edificio lleva paralizado demasiado tiempo “y pensamos que el Ministerio nos va a dejar nunca trabajar con ese dinero”, porque según argumenta Industria las obras no se ejecutaron en plazo, “pero todos los segovianos saben la razón”, dijo, y es que la empresa adjudicataria de las obras dio en quiebra, por lo que no se concluyeron los trabajos.
Así que el Ayuntamiento ha decidido ‘coger el toro por los cuernos’ y devolver la parte de la subvención que resta por invertir y ejecutar el resto de las obras con fondos propios, de modo que el edificio esté en funcionamiento en 2017, previsiblemente en verano u otoño, concretó Alfonso Reguera, portavoz del equipo de Gobierno socialista.
Según los datos aportados por la alcaldesa, queda por ejecutar una partida de 3.430.000 euros, pero el dinero que se devolverá al Ministerio asciende a 2.190.243 euros, puesto que hay una parte que ya está amortizada. El Ayuntamiento ya ha enviado un escrito a Industria y está a la espera de respuesta, porque el departamento gubernamental tiene que aceptar las condiciones propuestas que, obviamente, “son las más ventajosas para nosotros, dentro de la legalidad”, afirmó Reguera.
El siguiente paso es dotar de presupuesto a las obras, y se calcula que será necesaria para la terminación del edificio una partida de unos tres millones de
euros, dijo la alcaldesa, a repartir entre los dos próximos ejercicios: 2016 y 2017. Para ello es para lo que se pide hoy al pleno que dé el visto bueno a la modificación de crédito, de algo más de un millón de euros.
Respecto a de dónde saldrá el dinero que se destinará a terminar el CAT, Regera aseguró, coloquialmente, que “de la caja única del Ayuntamiento”, y puntualizó que como son deudas entre administraciones públicas “no computan a efectos de estabilidad presupuestaria ni condicionan el volumen de inversiones. Sale del capítulo de deuda pública y se incorpora a amortizaciones de préstamos a largo plazo con el Estado”.
El objetivo de este paso adelante por parte del Ayuntamiento no es otro que el de dotar de contenido al CAT y convertirlo en uno de los puntales económicos y de creación de empleo de la ciudad antes de que termine esta legislatura, como explicó la alcaldesa.
Además, Clara Luquero señaló que ya “hay proyectos despegando” y empresas interesadas por formar parte del Centro de las Artes y la Tecnología, aunque no quiso desvelar los detalles, pues aun están en conversaciones y no hay nada concretado.
De hecho, la urgencia hizo que se reuniera a los miembros de la mesa del CAT hace unos días para explicar la situación al resto de los grupos con representación municipal y la modificación presupuestaria se llevó a la comisión celebrada el pasado día 23. Según explicó Reguera, en dicha comisión el resto de los grupos se abstuvieron, así que el equipo de Gobierno espera que en el pleno de hoy, al menos, mantengan esa abstención y no haya un rechazo rotundo a esta medida, que supondrá, quizás, el impulso que el CAT necesita para despegar.
