El Gobierno municipal pedirá de inmediato al Ministerio de Cultura que emprenda la tramitación administrativa para ceder al Ayuntamiento el histórico edificio, situado en la calle Juan Bravo, que acoge hoy la Biblioteca Pública del Estado en Segovia y que gestiona la Junta de Castilla y León. El propósito municipal pasa por crear en el inmueble, antigua cárcel real, situado en la Calle Real una biblioteca municipal, que pueda trabajar ‘en red’ con la nueva Biblioteca Pública de Segovia, que se encuentra en la recta final de su construcción, en el entorno de la plaza de toros, junto al barrio de Nueva Segovia.
La alcaldesa de Segovia, Clara Luquero (PSOE), en declaraciones a EL ADELANTADO, explicó ayer que, este lunes, remitirá una carta al Ministerio para recordar el escrito, que obra en poder del Ayuntamiento, del antiguo director general del Libro, Rogelio Blanco, en el que éste comprometió la cesión al Ayuntamiento del histórico edificio. «Vamos a solicitar que se haga la tramitación administrativa correspondiente para que, una vez que empiece a funcionar la nueva Biblioteca, el edificio de la Calle Real pase al Ayuntamiento y podamos crear una biblioteca municipal», indicó Luquero.
El inmueble situado en el número 11 de la calle de Juan Bravo era propiedad del Ayuntamiento de Segovia hasta que en la década de los 40 del siglo XX lo cedió al Ministerio de Educación con la condición de que fuera archivo, museo o biblioteca. Esta última opción fue la elegida y comenzó a funcionar en 1948. Sin embargo, según precisó Luquero, al haber transcurrido más de 40 años de aquella cesión, la ley impide al Ayuntamiento pedir la ‘reversión’, por lo que la clave es que exista una ‘voluntad política’ por parte del Gobierno y, en su caso, también de la Junta de Castilla y León para que se cumpla el propósito municipal.
Responsables de la administración regional ya expresaron su apoyo para que la ciudad no pierda una dotación cultural, en este caso una biblioteca, en su casco histórico; mientras que, como recordó Luquero, los antiguos responsables de la Dirección General del Libro también expresaron su respaldo a transferir la titularidad del inmueble, condicionada a la instalación de una biblioteca municipal, precisamente el objetivo que persigue el Ayuntamiento.
La alcaldesa admitió que la futura biblioteca municipal «será modesta» porque «no tendrá ni los fondos ni los medios» de la nueva Biblioteca situada junto a Nueva Segovia y que comenzará a funcionar, a lo largo de 2015, aunque «trabajaremos e red» de manera que, según puso como ejemplo, «una persona podrá solicitar un libro en la municipal e, inmediatamente, traérselo de la otra». Luquero indicó que la futura biblioteca municipal contará con una sala de estudio, que se unirá a las que ya existen en San Jose, La Albuera y San Lorenzo (además de la que contará la nueva Biblioteca del Estado); y contará con su propio programa de actividades, destinado especialmente a los vecinos del casco histórico, como un plan de animación a la lectura.
LA ANTIGUA CÁRCEL REAL DONDE ESTUVO PRESO LOPE DE VEGA
El interés histórico del inmueble que hoy acoge la Biblioteca, declarado BIC en 1985, atesora un enorme valor histórico, como indica la ficha del PGOU de 2008 referida al edificio. A finales del siglo X se levantó un monasterio de monjas cistercienses. Al poco tiempo lo abandonaron trasladándose extramuros, y pasó a ser utilizada como cárcel. La Cárcel Real, estaba compuesta por un conjunto de edificios y dependencias de diferentes alturas y materiales. El mal estado de estas dependencias propició que el Consejo se planteara su derribo y reconstrucción, así como la reordenación de las calles contiguas. El ilustre dramaturgo Lope de Vega fue allí encarcelado en el año 1577.
Fue objeto de continuas obras hasta que en la última década del siglo XVI, se llevaron a cabo las primeras obras de remodelación del edificio de cierta importancia. Las obras se prolongaron durante el primer tercio del siglo XVII. En el año 1737 se realizaron nuevas obras (sustituyendo los emblemas heráldicos de los Austrias por las tres lises de los Borbones). Tras esta reforma la Cárcel Real alcanzó la fisonomía exterior que todavía hoy se puede apreciar. De lo que debió ser el primitivo edificio no se conserva ya nada, excepción hecha de las rejas de las ventanas.
La Biblioteca Pública fue fundada en 1842 con los fondos procedentes de las desamortizaciones de Madoz y Mendizábal. Por su nueva función de Palacio de Archivos y Bibliotecas se llevaron a cabo obras de adaptación entre 1943 y 1947. Las últimas remodelaciones se efectuaron entre 1985 y 1989. Las obras llevadas a cabo entre 1999 y 2001 se centraron principalmente en la reconversión de la segunda planta, que ocupó hasta el año 1996 el Archivo Histórico Provincial. En la Calle Real, junto a la fachada principal, aparecieron restos arqueológicos de lo que parecía ser una “domus” romana y una placa de bronce conmemorativa.
