Aunque los servicios de limpieza se afanaron a lo largo de la tarde del lunes en limpiar las zonas más afectadas por la importante acumulación de agua tras la fuerte tormenta que descargó sobre la capital, aún eran evidentes los restos de tierra, hojas secas y residuos que el torrente acumuló en poco tiempo y que generaron serios problemas en calles y plazas. En la plaza de Somorrostro, el paisaje tras la tormenta dejaba ver en la zona anegada por el agua las huellas de barro y tierra que ayer los bomberos limpiaron en primera instancia y los servicios de limpieza terminaron de adecentar para devolver a este lugar su aspecto original.
Los vecinos de la zona comentaban ayer el suceso que llenó las redes sociales de comentarios en los que se achaca el problema a la falta de limpieza del alcantarillado, cuyo estado impidió asumir el agua acumulada por la lluvia en tan corto espacio de tiempo. El concejal de Urbanismo Alfonso Reguera, en declaraciones a una emisora de radio local, justificó este hecho por la ausencia de lluvias durante el verano, que hizo que el agua caída en la tormenta de la tarde del lunes «arrastre materiales de tejados, y otras zonas que pueden llegar a taponar las alcantarillas en un momento determinado». Asimismo, precisó que en las zonas más bajas de la ciudad, el volumen de agua que llega de forma tan sorpresiva y violenta como el pasado lunes «no es asumido por las alcantarillas aunque estuvieran en perfecto estado».
El concejal aseguró que el Ayuntamiento ha trabajado en años anteriores haciendo balsas de aluvión en zonas como La Fuencisla para evitar la acumulación de agua, pero señaló que inicialmente no hay previstas nuevas intervenciones referidas a la limpieza del alcantarillado. «En principio, con una tormenta tan fuerte y tan inmediata como la que sufrimos, lo único que podemos hacer es lo que hemos hecho, que es intervenir con los servicios de emergencia para achicar y limpiar», aseguró.
Reguera resaltó el trabajo realizado por Policía Local y Bomberos en la tarde de ayer, y aseguró que los daños causados por la tormenta fueron muy escasos. Además, pidió «paciencia» a los ciudadanos en cuanto a la limpieza de las zonas afectadas, y aseguró que tanto los servicios de Limpieza Viaria y Parques y Jardines «están trabajando al cien por cien, pero no podemos estar en todos los sitios a la vez».
Un torrente de frustración para ‘La Canastilla’.-Recién concluidas sus vacaciones, la propietaria de la Mercería ‘La Canastilla’ situada en la Plaza de Somorrostro se disponía el pasado lunes a reanudar su actividad comercial con nuevo género de ropa infantil y para bebés que acababa de recibir y que se disponía a clasificar y colocar para su venta. A primera hora de la tarde, la tromba de agua que cayó en la capital trajo un torrente de agua que inundó la práctica totalidad de su establecimiento , así como el comercio contiguo Cenoura, dedicado a la ropa infantil, generando importantes daños que los peritos del seguro procederán a evaluar en los próximos días.
«No me lo podía creer cuando llegué ayer a la tienda», aseguraba con la emoción contenida en la voz después de unas horas en las que ha pasado de la incredulidad a la decepción, para finalmente asumir un suceso que le hará redoblar esfuerzos para sacar adelante su negocio.
Para la empresaria, la actuación de la Policía Local y de los Bomberos fue «de 10», colaborando en todo momento para intentar en lo posible minimizar los daños causados por el agua, y tras varias horas de achique y limpieza, la jornada de ayer estuvo dedicada a intentar evaluar las pérdidas por el género afectado por el agua. La tarima de madera del suelo de la tienda también resultó perjudicada, ya que una vez que el agua termine de secarse «lo normal es que la madera crezca y se estropee», según explicó. Pese a ello, la propietaria de la tienda recurre al humor para superar este trance y confía en poder afrontar una nueva etapa tras un episodio inesperado