El Consistorio, desde su área de urbanismo, continúa acometiendo obras para mejorar el aspecto de las calles y vías de la localidad, pero con el objetivo principal de aumentar su calidad y la seguridad de los vehículos y peatones. Una de las que han terminado recientemente es la acera del inicio de la calle Severo Ochoa. El alto riesgo para el tránsito de los peatones era la principal preocupación del Ayuntamiento, debido al enorme desnivel que existía. Además del vertical por estar situada en una zona de pendiente, existía un enorme desnivel de lado a lado de la acera, que dificultaba el paso. Además, la baldosa antigua resultaba muy deslizante y se habían provocado caídas de algunos vecinos, por lo que lo primordial ha sido garantizar la seguridad en todo caso.
Los trabajos realizados por los servicios municipales comenzaron con la nivelación de la superficie. Se ha elevado el bordillo del lado exterior y se ha nivelado con el interior. El tramo recto también se ha prolongado para que el resultado final haya sido una superficie homógenea y lo más uniforme posible. Para terminar, se han colocado unas barandillas; primero se colocó la del margen exterior, pero, finalmente, se colocó otra en el interior para facilitar del todo el paso de los peatones. Las personas mayores han sido el público objetivo de esta acción, que además, por ser zona comercial, suelen llevar carros o utensilios que dificultan aún más el tránsito. De esta manera podrán hacer uso de las barandillas y evitar riesgos, de los que el resto de personas tampoco estaban exentos debido al mal estado de las baldosas de esa acera. Por otro lado, la instalación de las barandillas ya está evitando que los vehículos aparquen dentro como ocurría antes, con la consecuente invasión del espacio del peatón y el peligro que conlleva. Con esta obra continúa el proceso de arreglo de vías que es constante en las actividades municipales. Igualmente, ya se están iniciando otras por zonas próximas al centro.