El Atlético de Madrid se estrenó ayer de la mejor manera posible en una nueva edición de la Copa del Rey tras vencer al modesto Sant Andreu con goles de Raúl García, Villa y Arda Turan, que firmó un doblete, en un encuentro en el que el conjunto ‘colchonero’ fue muy superior al cuadro catalán.
Consciente del rival al que se enfrentaba, el ‘Cholo’ Simeone dio descanso a los hombres más habituales en el once titular y permitió que jugadores como Aranzubia, Manquillo y Oliver acumularan minutos en esta temporada. Además, con esta victoria el vigente campeón de la Copa deja sentenciado, salvo sorpresa, el pase a la siguiente ronda.
A pesar de ser un oponente que juega en Segunda B, el técnico argentino supo inculcar a sus jugadores la misma intensidad con la que salen en los partidos de Liga. Desde el pitido inicial, los madrileños se fueron haciendo poco a poco con el encuentro, y en el minuto 12 Raúl García aprovechó un gran centro de Filipe Luis para poner el primer tanto en el luminoso.
No esperó mucho más la escuadra visitante para asestar el golpe definitivo y, ocho minutos después, Arda Turan subió el segundo en el marcador gracias a una gran asistencia de Manquillo. La ventaja asustó al Sant Andreu, que cerró filas para evitar una sangría mayor y dio alas al conjunto rojiblanco, que, comandado por un Koke inspirado, manejó el partido sin dificultad.
Reanudación
Tras el descanso, y lejos de levantar el pie del acelerador, el Atlético siguió con la misma intensidad con la que acabó la primera mitad y rápidamente se fue lanzado a por el tercer gol. Morales salvó hasta en dos ocasiones el tercer gol visitante, pero finalmente Arda Turan logró ampliar de nuevo la ventaja tras un recorte con el tacón con el que sentó a la defensa catalana.
Con el tercero en el electrónico, el conjunto de Patxi Salinas vivió un momento de inspiración en el que pudo haber recortado distancias, pero Aranzubia, que tuvo muy poco trabajo, salvó sin dificultades las acometidas del conjunto catalán.
Ya con el partido sentenciado, el Atlético puso la puntilla. La pasividad de la defensa local y el cansancio que hizo mella a partir del minuto 70 provocó que Villa recortara sin problemas a los centrales y batiera a un Morales, que no pudo evitar un nuevo tanto.
