Ha escrito seis capítulos de su novela, y reconoce que aún le falta mucho; es una gran idea que, poco a poco, irá tomando forma. Una cosa es segura: Lucía Naveiro no va parar de escribir porque posee la tenacidad y el talento necesario para que esa novela salga a la luz algún día. Hay muchas formas de hacer las cosas, pero solo hay una forma de hacerlas bien, y de eso sabe mucho esta joven gaditana, estudiante de primer curso de Comunicación en IE University, que escribe su primera novela en Segovia; lo hace despacio, sin mirar al reloj ni al calendario.
Dicen que Dios inventó el tiempo y los hombres las prisas; Lucía huye de la rapidez de las cosas porque sabe que lo bueno es aquello que se cocina a fuego lento. Hasta ahora, su proyecto literario cuenta con un principio cautivador, un desenlace asombroso, y una localización estimulante, Nueva York, la ciudad que nunca duerme, protagonista de muchas novelas y clásicos de la literatura. “No puedo revelarte nada, solo puedo decir que mi novela se desarrolla en los años veinte del siglo XX”, asegura Lucía mientras se le escapa una sonrisa.
Lucía Naveiro tiene un gran talento para la literatura. Desde muy pequeña, la joven gaditana sintió predilección por la lectura y por escribir sus propias historias. Era muy divertido coger un libro de la biblioteca o un papel para escribir y dejar volar la imaginación, transportarse a otros mundos, vivir aventuras más allá de su Cádiz natal. Gracias a esta afición, Lucía ganó varios premios de literatura durante el colegio y el bachillerato; el más importante de ellos fue el concurso de narraciones cortas “Luis Landero”, en el que competían estudiantes preuniversitarios de toda España y de Latinoamérica.
¿Y qué hace una gaditana estudiando en Segovia? Lucía ríe y encoge los hombros. “Aquí estoy muy feliz”, asegura. Cuenta que su colegio era el Centro Inglés del Puerto de Santa María, una reconocida institución en Andalucía que utiliza los idiomas como vehículo de comunicación entre alumnos y profesores. Influenciada por la enseñanza bilingüe, Lucía empezó a buscar universidades que impartieran el grado en Comunicación en inglés. “Buscaba una universidad internacional donde hubiera personas de todas las partes del mundo y en la que se impartiera una enseñanza innovadora, dinámica e interdisciplinar”.
En este sentido, el Grado en Comunicación de IE University era perfecto para ella, ya que es una carrera que abarca varios campos del conocimiento, como el marketing, el periodismo o la comunicación corporativa. Un plan de estudios realmente innovador y humanista junto con la diversidad del campus de alumnos y profesores fueron aspectos determinantes para Lucía, que no dudó en hacer las maletas para venir al Campus de Santa Cruz la Real.
“Segovia era el último sitio donde me imaginaba que iba a estar, pero a día de hoy me alegro mucho de haber venido; además es una ciudad perfecta y muy manejable para un estudiante de primer año, que tiene que empezar una vida solo lejos de su casa”, señala. Actualmente, la estudiante gaditana disfruta de una beca por rendimiento académico que cubre el 20 por ciento de la matrícula gracias a unas excelentes calificaciones en bachillerato, con una nota media de 9,5.
“Me encanta la diversidad que hay en las clases de IE University; el aprendizaje se multiplica en una clase con estudiantes de diferentes partes del mundo”, asegura Lucía, que subraya que “el ambiente internacional de IE, donde escuchas experiencias de vida tan diferentes, te abre la mente y te hace contemplar el mundo desde una perspectiva global”.
La joven gaditana es un torrente creativo. No puede vivir lejos del arte, lo lleva en su sangre andaluza. Así, no se limita a estudiar comunicación y a desarrollar una faceta de escritora de relatos, sino que además es oboísta de conservatorio y se ha integrado en el mundo musical de Segovia. Actualmente toca en la Banda Sinfónica Tierra de Segovia, creada en 2012 por iniciativa de un grupo de músicos segovianos, impulsados por su director Chema García Portela, y ha participado, entre otras actividades, en miniconciertos en las Jornadas de Música Contemporánea en la Cárcel_Segovia Centro de Creación.
Con la música pasó algo parecido a la escritura. Con ocho años, empezó estudios musicales y diez años después se graduó en sexto de enseñanza profesional de conservatorio en Cádiz. En la ciudad andaluza participó en varias bandas y orquestas y una vez que llegó a Segovia no quiso perder la rutina de los ensayos y los conciertos. “En la Banda Sinfónica Tierra de Segovia me recibieron muy bien, necesitan un oboe y allí estaba yo”, comenta Lucía, que no quiere pasar por alto el excelente compañerismo que se respira en esta banda segoviana, que ensaya cada dos fines de semana en la Cárcel_Segovia.
En el campus, también ha empezado a colaborar con el antropólogo e historiador Juan José Prat, profesor de IE University, que publicó a principios de año un estudio en el que revisa la música y la sociedad cubana del siglo XIX. La idea es formar un pequeño grupo musical que recupere el repertorio más popular y conocido de los autores que enriquecieron y dieron forma al baile en Cuba durante toda la centuria.
Lucía no quiere que su pensamiento creativo se ralentice o se detenga, siempre está a la búsqueda de algo que sea creativo. Le apasiona la publicidad, el periodismo y la comunicación corporativa, y reconoce que en un futuro le gustaría relacionar esos estudios de Comunicación en IE University con alguna disciplina artística, con la literatura o la música.
Acaba de empezar su etapa universitaria y Lucía tiene el talento y la paciencia para formarse profesionalmente durante los próximos años. De momento, sigue sin quitarse de la cabeza esa novela que ya ha empezado a escribir y que, probablemente, termine en Segovia, la ciudad al pie de la Sierra de Guadarrama, que hace poco tiempo no estaba en sus planes, pero que, a día de hoy, es un lugar perfecto para inspirarse como artista y para formarse como una excelente comunicadora.
