Los controladores de la ORA repartieron ayer unos trípticos informativos en las nuevas zonas de estacionamiento regulado de la ciudad. Desde ayer el barrio de Santa Eulalia ya es zona azul en prácticamente toda su superficie y aparcar en las plazas habilitadas —algo más de medio millar, repartidas en casi una veintena de vías— va a tener un coste.
El Ayuntamiento y la empresa concesionaria del servicio, Setex Aparqui S. A., cumplen así con la solicitud realizada por una mayoría de vecinos del barrio, según afirma la presidenta de la asociación de vecinos, Esther Santos, y también de gran parte de los comerciantes y propietarios de negocios de la zona.
Santos asegura que había una serie de calles del barrio, entre ellas una comercial por excelencia como Alférez Provisional y los aledaños del nuevo campus ‘María Zambrano’ de la Universidad de Valladolid, que “eran como isletas rodeadas por zona azul”.
Esa situación había provocado “un efecto rebote, de manera que muchos funcionarios y trabajadores del centro dejaban sus coches a primera hora de la mañana y copaban las plazas de aparcamiento en muchos casos para todo el día”. La representante vecinal admite que ese “efecto rebote” alcanzará ahora a otras zonas limítrofes, especialmente a la avenida de la Constitución y las calles que delimitan las conocidas como viviendas militares.
En el primer día de entrada en vigor de la modificación ordenanza municipal reguladora del aparcamiento en superficie (ORA), fueron muchos los conductores que, resignados, se precipitaron hacia los parquímetros, aunque desde la Concejalía de Tráfico y Movilidad, su responsable Alfonso Reguera, había informado de que los primeros días no habrá sanciones.
“¡Atención! Nuevas zonas de estacionamiento regulado”. Ese es el mensaje de la portada del tríptico informativo que ayer repartieron los controladores de la ORA en la zona y que incluye instrucciones del funcionamiento de los parquímetros, un mapa-croquis de las nuevas calles incluidas en la zona azul (además de las pertenecientes al barrio de Santa Eulalia se incluye la calle San Gabriel), así como una breve explicación sobre tarifas e infracciones.
Hubo quien se mostró sorprendido porque los parquímetros estuvieran ayer operativos, pese a que no se sancionaba a quienes no obtenían tique y lo puso como ejemplo del “afán recaudatorio” de esta ordenanza.
Cada conductor, cada ciudadano, tiene una opinión formada sobre los beneficios y perjuicios que conlleva la ampliación de la zona azul en la ciudad. Un joven segoviano afincado en otra ciudad, aseguraba que cada vez que vuelve a Segovia encuentra más dificultades para encontrar un aparcamiento gratuito. “El otro día por primera vez tuve que meterme en un aparcamiento subterráneo de pago; es cierto q ue comparado con los parking de Madrid o Barcelona es más barato pero es un coste añadido”.
Por su parte, Pilar, comerciante de la calle Alférez Provisional, propone la creación de una tarjeta no solo para residentes sino también “para los que trabajamos en una zona donde hay ORA, ya sean autónomos o empleados por cuenta ajena. En mi caso he tenido que alquilar una plaza de garaje pero el problema añadido en esta zona es que la gran mayoría de edificios son antiguos y no tienen garaje”.
El transporte público no parece cumplir como alternativa viable en todos los casos. Así lo indicaba ayer Noelia en la plaza del Alto de los Leones de Castilla. Esta joven, residente en un pueblo tenía que acudir a la oficina de empleo y no tuvo otro remedio que “coger el coche porque si no tendría que esperar más de dos horas al autobús”.
