La Policía Local recogió el pasado año un total de 332 objetos perdidos, que custodia en las dependencias de su acuartelamiento en el Polígono ‘El Cerro’ a la espera de que sus propietarios los recuperen tras justificar su propiedad. Las carteras con documentación, los teléfonos móviles, las tarjetas de crédito y los DNI son los más descuidados por los segovianos, sin olvidar los llaveros y llaves extraviadas que se almacenan en un enorme cajón de cartón en la Policía Local. Los meses de verano son los más propensos a la pérdida de efectos, aunque en 2015 se experimentó un descenso del 7,2 por ciento en el número de objetos recogidos con respecto a 2014. La Policía Local mantiene en depósito los efectos extraviados durante un periodo de dos años, tal y como establece el Código Civil, y pasado ese tiempo, se pone en contacto con la persona que los encontró por si quiere hacerse cargo de ellos.
En la planta baja del cuartel de la Policía Local, se conservan el grueso de los objetos que permanecen a la espera de que sus dueños los recojan. Prendas de vestir como sombreros, bufandas o chaquetas comparten estanterías con otros como bicicletas, paraguas, maletas o mochilas, que en su día fueron abandonadas involuntariamente por sus propietarios. También pueden verse objetos tan peculiares como el mando a distancia de una grúa, aparato de gran valor cuya pérdida habrá causado más de un quebradero de cabeza a su operario.
En la entrada del acuartelamiento, la Policía Local ha habilitado una pequeña sección para custodiar los objetos que más frecuentemente suelen extraviarse, tales como carteras, teléfonos móviles o llaveros. El inspector Jacinto Jorge, explica que estos efectos suelen ser reclamados rápidamente por las personas que los pierden debido a su utilidad, teniendo en cuenta que en el caso de las carteras suelen llevar la documentación que hace posible su identificación.
En estos casos, la propia Policía Local se pone en contacto con los ciudadanos a través de los datos que figuran en la documentación encontrada, con lo que el porcentaje de devolución tanto de estos efectos como de los llaveros se estima entre un 30 y un 40 por ciento. Los datos correspondientes a 2015 indican que el pasado año se recogieron un total de 120 carteras con documentación, así como 72 DNI y 13 tarjetas de crédito, a los que se suman los 26 llaveros entregados a la Policía Local.
En el caso de los teléfonos móviles, Jorge explica que si se mantienen en funcionamiento «podemos buscar a su propietario a través de la agenda telefónica almacenada, pero una vez agotada la batería esto ya no es posible». Así, el pasado año se contabilizaron 30 teléfonos perdidos, que se conservan en las instalaciones de la Policía Local junto a otros que aún no han sido devueltos presumiblemente por que las prestaciones que ofrecen los modelos han quedado ya obsoletas.
En cuanto a las zonas en las que se registran el mayor número de pérdidas, la Plaza Mayor, Via Roma, Azoguejo y Conde Sepúlveda ocupan los primeros lugares en la estadística elaborada por la Policía Local, aunque más del 50 por ciento de los objetos que se recogen no tienen una ubicación definida, ya que la persona que hace la entrega no facilita o desconoce el lugar en el que lo ha encontrado, según explica el inspector Jacinto Jorge.
La primavera y el verano son las épocas en las que se registran un mayor número de pérdidas. Así, el pasado mes de abril se contabilizaron un total de 51 objetos perdidos, mientras que mayo (36), marzo (34) y junio (29) fueron también meses con cifras elevadas de pérdidas.
El Código Civil establece que los objetos perdidos deben permanecer custodiados por el Ayuntamiento y disposición de sus dueños durante un plazo de dos años, periodo a partir del cual la persona que los haya encontrado puede adquirir su propiedad.
