El Patronato del Alcázar conmemora hoy el aniversario del incendio que hace 149 años devastó la fortaleza segoviana con un ejercicio de simulacro en el que se probarán todos los sistemas de seguridad anti-incendios de los que dispone el histórico edificio.
Este año, el simulacro pretende poner en práctica el rescate de medios humanos y obras de arte, y para ello, colaborarán en este ejercicio el personal que trabaja en el Alcázar, así como el del Archivo General Militar, que comparte algunas de las dependencias de la fortaleza. Además, la organización invitará a participar a voluntarios y turistas que deseen incorporarse a este ejercicio.
El sistema instalado en el Alcázar ha sido diseñado por el Servicio de Bomberos de Segovia, y protege de forma específica en los 5.000 metros cuadrados de cubiertas y techumbres del edificio, cuya estructura de madera les hace especialmente sensibles al fuego.
Para abastecer de agua a los equipos, existe un aljibe que almacena cerca de 10.000 litros de agua en las inmediaciones del monumento que está conectado a la red de suministro de la ciudad, con lo que se garantiza que en ningún momento los equipos queden desabastecidos.
La situación de las tuberías permite incluso recuperar en el aljibe el agua que no se utilice, ya que fueron instaladas con una inclinación que devuelve de forma automática el agua que queda tras realizar la intervención.
