El alcalde de El Espinar, Francisco Jorge, reivindica la conservación del medio a través del uso de los recursos que aporta a los habitantes de las zonas con algún tipo de ordenación o incluidas en alguna figura de protección. Es el caso de El Espinar, incluido dentro de la Reserva de la Biosfera del Guadarrama, junto al Real Sitio de San Ildefonso. “Los territorios se han conservado porque se han podido usar. Nuestras gentes han sabido aprovecharse de sus recursos de una manera racional, porque ello ha permitido la continuidad de los recursos a lo largo de los siglos”, advirtió el regidor. Jorge fue invitado junto al alcalde del Real Sitio, José Luis Vázquez, a participar en una mesa redonda en la que se analizaban las consecuencias en el desarrollo local de las reservas mundiales de la Biosfera.
Francisco Jorge señaló que el aprovechamiento maderero ha estado ordenado y complementado por el viejo oficio de la gabarrería, cuyos protagonistas eran encargados del aprovechamiento de leñas muertas, que conllevaban una limpieza y regeneración del monte con unos resultados óptimos. “La caza permite el control de sobreexplotación de algunas especies. Los pastos y sus ciclos de invierno y primavera han garantizado el alimento para una ganadería extensiva que ha generado una materia prima de primerísima calidad ante la que ahora se abre la oportunidad recurso de contar con un marchamo de marca calidad de escala mundial”, apuntó.
“Entramos en un camino que debe suponer un salto cualitativo que combine y permita conjugar la preservación con el desarrollo y eso solo se puede conseguir con figuras normativas que permitan conservación, pero indispensable vinculada a poder seguir usando y aprovechando los recursos que hay en nuestros territorios”, concretó el regidor espinariego.
Francisco Jorge defendió que la normativa y la legislación deben ser muy amplias para favorecer en el territorio usos compatibles con el desarrollo de sectores como el turístico, “porque a través de actividades y establecimientos vinculados a alojamientos, estancias, uso educativo de la naturaleza, ocio relacionado con el entorno etc., estamos diversificando nuestra economía y la estamos vinculando a un factor inagotable”.
Desde el punto de vista económico, el alcalde reclamó que se deben permitir y fomentar las actividades como recurso de turismo en la naturaleza, la bioenergía, la explotación maderera, o las industrias agropecuarias y agroalimentarias. “Durante siglos los moradores de estas tierras han tenido una relación con su entorno que les ha valido para ser merecedores de un reconocimiento mundial en forma de la Reserva de la Biosfera”, concluyó.
El alcalde del Real Sitio de San Ildefonso, por su parte, repasó el proceso de creación de la Reserva de la Biosfera y habló de las esperanzas que se han puesto en esta figura, que ha surgido, dijo “de abajo a arriba”.