Tras el éxito de la reinauguración de la centenaria Plaza de Toros ‘Ángel Benito’, Prádena acogió este domingo el segundo festejo taurino de sus fiestas del Sagrado Corazón de Jesús con una becerrada para alumnos de escuelas taurinas, que alcanzó grandes cotas a nivel artístico. El triunfo de la cantera. Sobresalió el segoviano Jaime Hermosa que obtuvo los máximos trofeos, en una tarde en la que salió en hombros junto a su compañero de la Escuela Provincial Jesús Manso y Miguel Remiro, del centro ‘Mar de Nubes’ de Zaragoza, ambos dos dos orejas. Un trofeo logró el novillero de Palazuelos de Eresma, Daniel Hernández, dentro de un festejo que completó el peruano Alejandro Chávarri, que en su debut de luces dio una vuelta al ruedo. Se lidiaron cinco añojos de la ganadería segoviana de Cayetano de Frutos, de gran juego, entre los que fue reconocido con el arrastre de la vuelta al ruedo el quinto. Para la ocasión, estuvo el presidente de la Diputación de Segovia, Miguel Ángel de Vicente, acompañado por el alcalde del municipio, Ismael Masedo.

Abrió plaza Hernández ante un ejemplar de buena condición, noble y con clase. El novillero de Palazuelos, aunque en ocasiones quedó desarmado, dejó pasajes destacados al natural. Cuando se asentó, logró un toreo de trazo largo y limpio para dejar una notable actuación y pasear la primera oreja de la tarde.

Manso firmó una importante faena, impregnada de temple y reposo. Dispuesto con el capote, dejó después buenos naturales con un astado de extraordinaria condición. La joven promesa del barrio de San Lorenzo aprovechó las virtudes del añojo, dándolo tiempo, y redondeó una actuación que fue premiada con dos trofeos, e incluso un sector de los tendidos llegó a reclamar el rabo.

Muy decidido tomó parte Chavarri al recibir a su antagonista de rodillas en el tercio para después recetar una seria de verónicas de corte artista. Variado en el quite, el peruano continuó su labor con un trasteo de muleta en el que destacó por su firmeza y asentamiento ante un animal jabonero de excelente comportamiento. Sin tino a espadas, el alumno de la Escuela Taurina de Palencia fue finalmente reconocido con vuelta al ruedo.

Remiro fue todo delicadeza con el cuarto ejemplar de la tarde, otro añojo de Cayetano de Frutos de excelente juego. Tiene el alumno del centro taurino zaragozano una muñeca de mucho temple. De esta manera, dejó pases muy reunidos ante un animal noble y con recorrido. Buena actuación del alumno de la Escuela ‘Mar de Nubes’, que fue reconocida con dos apéndices.

Cerró plaza Hermosa, con un toreo al ralentí. La despaciosidad por bandera. Con una asoleradas maneras, que recuerdan a un toreo añejo de otra época, el novillero de Hontanares de Eresma firmó una faena de poso y relajo ante un astado justo de fuerzas, pero pronto y repetidor y de alta nota. Gran actuación del alumno de la Escuela Provincial que redondeó con la espada para apuntarse un nuevo triunfo con los máximos trofeos: dos orejas y rabo. Así, se puso el broche a un festejo en el que las jóvenes promesas del toreo pudieron dejar muestras de su evolución en el centenario coso de Prádena.
Ficha
Plaza de Toros ‘Ángel Benito’ de Prádena. Segundo festejo de las fiestas. Media entrada. cinco añojos de Cayetano de Frutos, de extraordinaria condición. El quinto fue reconocido con la vuelta al ruedo.
Daniel Hernández, de la ET de Segovia, oreja (aviso).
Jesús Manso, de la ET de Segovia, dos orejas con petición de rabo.
Alejandro Chavarri, de la ET de Palencia, vuelta al ruedo (aviso).
Miguel Remiro, de la ET ‘Mar de Nubes’ de Zaragoza, dos orejas.
Jaime Hermosa, de la ET de Segovia, dos orejas y rabo.
