El Segosala Naturpellet disputa a las once de la mañana hoy (siempre que haya podido llegar…) el encuentro de ida de la eliminatoria de semifinales por el ascenso a la Primera División de fútbol sala ante el IES Luis de Camoens en el pabellón Guillermo Molina de la Ciudad Autónoma de Ceuta, condicionado sin duda por un desplazamiento de lo más anómalo en el que la expedición segoviana ha tenido que utilizar hasta tres medios de transporte, el tren hasta Málaga, en coche hasta Cádiz, y en ferry hasta Ceuta. Mientras tanto, la Federación Española de Fútbol silba mirando hacia otro lado, no vaya a ser que alguien le pida unas mínimas explicaciones por ayudar en los desplazamientos a Canarias, pero no hacerlo a los de Ceuta y Melilla.
El encuentro frente al conjunto ceutí presenta no pocas dificultades para el equipo rojinegro más allá del eterno desplazamiento que además estuvo aderezado por la noche previa al encuentro que la expedición hubo de pasar en un alojamiento rural. El conjunto ceutí cuenta con una plantilla compensada que sabe que muchas de sus opciones de superar al Segosala pasan por hacer un gran encuentro en su pabellón, donde sólo ha dejado de lograr la victoria en cuatro partidos.
NÚMEROS PAREJOS
Los números quedan bastante parejos entre los dos conjuntos. El ceutí apoya su ataque en tres jugadoras que han anotado casi la mitad de los cien goles que ha marcado el Camoens en la liga. Scaletti suma 23, con 15 para Gayoso y 10 para Agustina.
El hecho de que la superficie el pabellón Guillermo Molina sea de parquet viene sin duda a favorecer el juego rápido que practica el Segosala, que en principio no cambiará su manera de hacer las cosas, que tan buen resultado le ha dado a lo largo de la temporada, si bien es cierto que el hecho de jugar una eliminatoria puede propiciar que el equipo no se lance a la presión de una manera tan alegre como ha hecho en otros encuentros, con evidente éxito puesto que el conjunto que entrena Agustín Pérez no pierde un partido desde el pasado 6 de abril cuando cayó por la mínima (1-0) en la pista del Básico Rivas. Desde ese partido, cuatro victorias y dos empates (ante el primer y el segundo clasificado) han elevado la moral del conjunto rojinegro, que en el presente curso ha ganado nueve partidos lejos del Pedro Delgado.
NADA DE DEFENDER EN DIEZ METROS
Así lo confirmó Agustín Pérez cuando señaló a esta redacción que “no hemos defendido en diez metros ni siquiera cuando hemos jugado partidos de Copa ante rivales de Primera División, y no vamos a hacerlo en este encuentro”. Cosa distinta será que, en la recta final del encuentro y si éste marcha igualado, no haya que pensar en un partido de vuelta, “pero de primeras vamos a intentar imponer el ritmo de juego más alto posible tratando de robar el balón cerca del área contraria y buscando impedir que el Camoens pueda jugar con facilidad con su pívot”. Las ausencias de Sonia, que ya estará para el duelo de vuelta, y Mónica serán las únicas en el Segosala que llegó a las nueve de la noche a su rural alojamiento en Ceuta.
El equipo segoviano no saldrá a especular frente a un oponente que tan sólo ha perdido tres partidos en su cancha
El duelo se presenta igualado, aunque el hecho de jugar en Segovia el encuentro de vuelta puede suponer una pequeña ventaja para el Segosala. Pero sin duda ésta queda anulada por el tremendo desgaste que le ha supuesto a un equipo (amateur) tener que coger casi tantos medios de transporte como Willy Fog en su intento de vuelta al mundo con el fin de poder llegar a Ceuta a tiempo para poder jugar un partido de fútbol sala. Doce horas de viaje. Vivir para ver.
