El Viveros Herol Nava vivió una más que positiva primera jornada de la competición en la Liga Sacyr Asobal, con una victoria contundente sobre el Frigoríficos Morrazo Cangas que no solo le eleva en la clasificación hasta la tercera plaza, un hecho anecdótico pero que siempre viene bien, sino que le reafirma en la buena línea de trabajo que se ha adquirido en la pretemporada.
No se puede negar que los últimos resultados del equipo en los amistosos habían puesto las ‘orejas tiesas’ a más de uno, así que había mucho interés por ver si el equipo navero iba a mostrar la cara que enseñó en la Copa Castilla y León, o si por el contrario iba a ser el que perdió con claridad en Cuenca.
PATOTSKI, Y RODRIGO
Afortunadamente, salió lo primero frente a un Cangas que aguantó durante el primer cuarto de hora, bien apoyados por Dani Fernández en el ataque, pero que no tardó en estrellarse ante un gigante en la portería como lo fue Dmitry Patotski, que con un cincuenta por ciento de intervenciones en la primera parte se las paró de todos los colores a los jugadores de Ignacio Moyano.
De entrada, los protagonistas del partido se soltaron pronto en ataque, con once goles marcados en los primeros cinco minutos. Nava dio primero, pero bastó una exclusión temprana de Mota para que Cangas endosara un parcial de 0-3 y pasara a liderar el marcador durante algunos (pocos) minutos, porque bastó con que Patotski mantuviera el nivel que había mostrado en los dos primeros ataque visitantes, y Rodrigo Pérez cogiera los galones en la ofensiva con cuatro goles consecutivos para que los de casa retomaran la delantera y poco a poco fueran ampliando la ventaja.
Un gol de Prokop colocaba el 11-9 en el electrónico y desatascaba un ataque navero que con Rodrigo en el banquillo no era tan fluido. Pero en cuanto Cangas elevó su defensa a 5:1 los espacios comenzaron a aparecer, y la defensa segoviana hizo el resto, porque no solo Patotski estuvo a un gran nivel, sino que tanto Crysanthos como Carró mostraron sus credenciales defensivas en el central, y en los contragolpes el Balonmano Nava fue minando poco a poco la moral de su rival, que ni siquiera cuando estuvo en superioridad numérica encontró la manera de superar a la defensa local.
PATOTSKI, Y EL CONTRAGOLPE
El ‘9’ se instaló en el casillero del Cangas durante demasiado tiempo, mientras que el Viveros Herol machacaba una y otra vez la portería defendida por Xavi Díaz en primera instancia, y por Gerard Forns posteriormente. El catalán mejoró los números de su compañero, pero ni mucho menos logró frenar la sangría.
Al descanso, el 17-11 reflejaba lo que había sido el primer tiempo, con un dominio claro del equipo de Zupo Equisoain, que afrontó la segunda parte sabiendo que, una vez adquirida la ventaja, tenía la complicada labor de mantenerla, y más cuando el Cangas apretó para reducir la desventaja hasta los cuatro goles, con Forns parando, y Carlos Asensio haciendo daño desde los seis metros.
PATOTSKI, Y SMETANKA
Pero ni el acercamiento del rival ni los diez minutos que se pasó el Viveros Herol en inferioridad numérica hicieron perder el paso al equipo navero. Cierto es que un buen número de ataques se ejecutaron con demasiada lentitud sin que hubiera una buena finalización, y que Patotski tuvo que volver a ponerse las pilas, con Haris Pleh echando una mano desde los siete metros, para que la ventaja no cayera, pero la sensación de partido controlado siempre estuvo presente en la cancha y en la grada, con la afición disfrutando como hacía tiempo no solo de la actuación de los ‘veteranos’, sino también de la irrupción de un descaradísimo Tomas Smetanka. El eslovaco jugó unos muy buenos minutos, mostrando las razones por las que el club le ha firmado para los próximos tres años en una clara apuesta de futuro.
A diez minutos para el final con 26-20 en el electrónico, el Cangas arriesgó con un 4:2 defensivo aprovechando una nueva exclusión para Crysanthos, y apostó por atacar con siete, vaciando la portería. Pero Nava ya se sabía cerca de la victoria, y fue ampliando la renta de goles hasta llegar al 31-22 con el que se cerró el partido, firmando así un más que buen inicio de liga. La semana que viene toca visita al dentista con el desplazamiento al Palau para jugar contra el Barça. Mejor hacerlo con dos puntos y buenas sensaciones.
