La Junta ha iniciado el Plan de Carreteras que se aplicará en Castilla y León durante los próximos diez años. A pesar de que el nuevo Plan Autonómico de Carreteras 2023-2034, sigue sin ver la luz, ya ha lanzado los concursos de las primeras cinco actuaciones vinculadas con nuevas vías y desdoblamientos, entre las que destaca la que se efectuará en la CL-601 en un tramo de 5,5 kilómetros, comprendido entre Segovia (SG-20) y la glorieta de Riofrío.
El tráfico que soportó esta carretera fue de 11.115 vehículos por día en 2021, si bien dispone de carril bici por la margen derecha y acera peatonal por la izquierda. Se ha redactado el proyecto de construcción del desdoblamiento de la vía, para el cual el presupuesto estimado es de 80.046,9 euros. Asimismo, la obra tendrá una duración aproximada de 12 meses.
El departamento de María González Corral recupera la ejecución de obra nueva en materia de carreteras, más allá de la conservación ordinaria o la mejora de la calzada o la señalización. Entre las licitaciones prevista, no figura ninguna autovía, de acuerdo a la línea política de la Junta, que contempla solo inversiones puntuales.
Las otras intervenciones previstas por la junta, tendrán lugar en Ávila, Burgos, Salamanca, Palencia y Soria. Según el calendario de la Junta, la primera en ponerse en marcha debería ser el proyecto para el desdoblamiento de la carretera CL-510 en un tramo de 2,15 kilómetros entre la ciudad de Salamanca y Santa Marta de Tormes. Le seguirán tramos 2+1, es decir, dos carriles en un sentido por uno en el contrario.
También comienza a planificarse el desdoblamiento de la CL-505 en el tramo más cercano a Ávila, ya que se trata de un acceso importante a la ciudad, que soporta el paso diario de unos 5.000 vehículos.
En cuanto a las nuevas carreteras, la Junta prevé impulsar el proyecto de construcción de una vía para conectar la SO-920 con la Autovía del Duero (A-11), en la localidad de El Burgo de Osma, en Soria. Por otra parte, también ha licitado la redacción del proyecto para terminar las obras de la carretera que unirá la N-623 y la CL-629, en Burgos, para evitar el paso por el actual desfiladero de Peñahorada.
En Palencia, la Concejalía ha planteado las obras para terminar la variante de Guardo, que conectará las carreteras CL-615 y CL-626, que pretende evitar el tránsito de vehículos por la localidad.
