El Obispado de Segovia y las parroquias de la provincia invirtieron el año pasado en restauración y conservación del patrimonio religioso 1.104.953,48 euros. La Diócesis ha hecho balance de 2018 y destaca que el “ingente patrimonio cultural que conforman los templos y los bienes muebles que en ellos se custodian, requieren de un constante esfuerzo para garantizar su mantenimiento”.
2018 se inició con tres iglesias cerradas al culto, las de Moraleja de Cuéllar, Ventosilla y Tejadilla y Fuentesoto, por la existencia de problemas estructurales severos en las cubiertas. Sin embargo, gracias al presupuesto de la Diócesis para obras en templos de los años 2017 y 2018 y al esfuerzo económico de las parroquias, los oriundos del lugar y algunos organismos públicos, estos tres templos están nuevamente abiertos al culto. Del mismo modo ha habido otras iglesias que, sin estar cerrados, requerían de intervenciones urgentes para evitar su cierre cautelar, como eran los casos de las iglesias de El Negredo, Perogordo y Carbonero de Ahusín, y se han resuelto a lo largo del año.
En Moraleja de Cuéllar se llevó a cabo la rehabilitación integral de la cubierta, con una inversión de 147.792,05 euros. En Ventosilla y Tejadilla también se arregló la cubierta, con un presupuesto de 127.713, 48 euros, y en Fuentesoto se ha rehabilitado la cubierta de la nave central de la iglesia, con un coste de 88.967,32 euros. En El Negredo también se acometió la rehabilitación integral de la cubierta (93.761,62 euros), que se completó con la realización de nuevos yugos de madera para las campanas, con un coste de 1.845,25 euros.
También se ha ejecutado el recalce de la cimentación del templo de Perogordo, con una inversión de 40.958,50 euros, y la rehabilitación parcial de la cubierta, adecuación del pavimento de acceso y saneamiento y puesta en valor del atrio de entrada de la iglesia de Carbonero de Ahusín (86.602,85 euros).
Además de estas actuaciones, hay tres parroquias de la Diócesis que han llevado a cabo obras en sus iglesias parroquiales, asumiento el coste en solitario. Se trata de la iglesia de San Miguel de Cuéllar (69.850,63 euros), Trescasas (54.804,53 euros) y Cabañas de Polendos (36.284,66 euros).
A esas inversiones, hay que sumar otros 401.018,19 euros que gastaron las parroquias en el mantenimiento, conservación y restauración, tanto de los templos como bienes que contienen. Por otro lado, están las inversiones que el Cabildo Catedralicio ejecuta en la Catedral, destacando los 50.000 euros destinados a la parroquia de Caballar.
A pesar de estas inversiones, este año la Diócesis se ha visto obligada al cierre cautelar de la iglesia parroquial de Aldehuela del Codonal, que requiere de una intervención en la cubierta del presbiterio. Desde el Obispado no se olvidan asimismo de las iglesias que llevan años en ruinas, su “asignatura pendiente”, como concluyen su comunicado.
