La III edición del Congreso de Hostelería y Turismo de Segovia se celebrará el 18 de noviembre en la Real Fábrica de Cristales de La Granja, donde se abordarán asuntos de actualidad como el nuevo registro de viajeros, la ciberseguridad en los establecimientos, el fenómeno de la ‘turismofobia’ o la convivencia entre residentes y turistas. Así lo presentaron el presidente de FES, Andrés Ortega; la presidenta de la Agrupación de Turismo de Segovia (Festur), Rocío Ruiz; y el presidente de la Asociación de turismo Rural y Activo, Gerardo Otero.
El evento contará con una sesión donde se expondrá un estudio realizado por la Universidad de Valladolid (UVa) y el Ayuntamiento sobre la gastronomía como recurso turístico.
Otra mesa estará dedicada al nuevo Real Decreto para el Registro de Viajeros, para el que se contará con invitados de la provincia, pero también de las asociaciones sectoriales y del Ministerio de Industria y Turismo. Para Otero existen muchas contradicciones en la nueva norma, donde se tienen que dar mucha información personal, alguna imposible de tener durante las reservas para las empresas, a las que a la vez se las exige cumplir la Ley de Protección de Datos. Y ello contrasta también con la falta de regulación de los pisos turísticos.
Otro capítulo será la ciberseguridad. Así, habrá una ‘píldora informativa Cibersegura’ que “enlazará” con la anterior edición respecto a la IA y la digitalización de los negocios, mirando ahora a “la necesidad de trabajar con seguridad informática”.
Por último, habrá una mesa redonda para analizar la situación en Segovia del fenómeno de la turismofobia. Ruiz expuso que en Segovia “se habla de problemas como la pérdida de plazas de aparcamiento, el descenso de oferta de pisos de alquiler por los estudiantes universitarios o las molestias en zonas del Casco Viejo por la presencia de turistas”. Así, se pretende abordar la situación escuchando a todas las partes, estudiar cómo es la situación respecto a la convivencia entre turistas y vecinos y comentar posibles soluciones. Ruiz comentó que se debe abordar este aspecto en una provincia como Segovia donde “la situación turística actual es muy dulce”, se experimenta “un incremento de visitantes” y “donde el turismo es una de las actividades económicas más importantes”. “Tenemos que evitar morder la mano que nos da de comer”, agregó.
Por su parte, Andrés Ortega recordó que Segovia se encuentra ”en un momento crucial donde se recuperan cifras de visitantes que nos acercan a la época prepandemia. En algunos casos puede suponer un colapso y generar efectos que no son los deseados”, dijo. “Además está creciendo la red de alojamientos de turismo rural, a los que también se les imponen nuevas obligaciones de registro de visitas a la vez que tienen que cumplir con la Ley de Protección de Datos”.
Igualmente dijo que la relevancia del turismo y la hostelería en el tejido empresarial “va mucho más allá de las cifras económicas, ya que ayudan a preservar la identidad cultural, fomentan la innovación, generan empleo y estimulan el desarrollo de sectores relacionados. Estos sectores no solo generan valor para los turistas, sino que también fortalecen las comunidades locales y promueven una economía más diversa y resiliente”
“Procuraremos analizar todos estos asuntos y avanzar en la ampliación de las pernoctaciones y establecer un diálogo donde todos podamos aprovechar el filón que Segovia tiene como atractivo turístico, por su gastronomía, su patrimonio cultural y monumental, y medio ambiental que redunda en el ámbito rural”, concluyó.
