De los creadores de El Mancho, el campo de la Cebrereña, o de La Llanera, el feudo de La Bañeza, llega a sus pantallas el Estadio Pepe Quimarán, en Posada de Llanera, un placer visual de las praderas asturianas a medio camino entre Avilés y Oviedo. Allí, en un terreno con arquitectura de futbolín, echará hoy el vermú la Segoviana, que se mide este domingo a partir de las 12:00 horas a la Unión Deportiva Llanera en un encuentro que servirá para avaluar hasta qué punto los azulgranas han pasado su trance y pueden poner tierra de por medio con la zona de descenso. Como en aquellos campos constreñidos de la Tercera División de Castilla y León, el cuadro que entrena Manu González deberá ponerse el mono de trabajo para sumar. “Vamos con mucha ilusión de ir un contexto muy diferente a lo que estamos acostumbrados a hacer un buen partido. Estamos preparados, mentalizados y con la idea muy clara de lo que tenemos que hacer para sumar los tres puntos, si podemos, o por lo menos traernos algo a casa”.
El técnico sabe lo que tiene delante. “Es un campo muy pequeño, lo que hace que haya muy pocos espacios. En amplitud es prácticamente imposible encontrar huecos; en profundidad el campo es más largo y se pueden encontrar soluciones”. Con todo, no busca excusas. “Nos toca ir a allí. Por suerte solo tenemos que ir este fin de semana y no ir más en esta temporada. Lo que tenemos que hacer es utilizar nuestras herramientas para sacar adelante el encuentro”.
Precisamente esa experiencia en Tercera ha servido en la preparación. “Hemos ido a jugar a campos muy difíciles y hemos hecho buenos partidos. No es un contexto igual porque este todavía es más pequeño, pero es parecido a La Bañeza o Cebreros. Campos muy complicados donde es difícil encontrar espacios y hemos sacado buenos resultados”. Sitúa la clave en no cometer errores. “Estoy convencido, por la calidad de nuestros jugadores, que va a aparecer alguno, o más de uno, para que nos dé esa tranquilidad en forma de goles«.
Las características del encuentro ponen en valor el recurso de Mansour, máximo goleador del equipo con cuatro tantos, a balón parado, en defensa y en ataque. “En un campo pequeño, donde obviamente esas acciones se van a dar más que en otro partido, es un jugador que nos puede dar mucho”.
La Segoviana mantiene el trabajo de las últimas semanas a la espera de terminar el año con buenos resultados entre hoy y la visita al Palencia Cristo. El regreso de los lesionados da a González el privilegio de elegir y la dinámica de entrenamientos mejora con 19 jugadores incorporados a la dinámica de grupo. “Tener que hacer descarte es una buena noticia”. La Segoviana busca más buenas noticias.
