Las Perseidas, también conocidas como Lágrimas de San Lorenzo, son una prolífica lluvia de meteoros que suele ser visible desde mediados de julio hasta finales de agosto. Se trata de una de los radiantes meteóricos más abundantes del año, con una tasa de unos 100 a la hora cuando las condiciones de observación son muy favorables. La contaminación lumínica hace que este evento no se pueda disfrutar en todo su esplendor solo en ciertos lugares. Y en la provincia de Segovia se encuentra uno de ellos. Concretamente, en El Espinar.
La gran calidad de este cielo nocturno ha impulsado en este municipio el llamado astroturismo. Y es que muchos astrónomos profesionales y aficionados, venidos de diferentes provincias se han acercado a la localidad espinariega a contemplar los planetas, las estrellas, las galaxias y hasta la Vía Láctea.
Este hecho motivó en el año 2007 la creación en El Espinar de la Asociación Hespérides de Ciencia y Tecnología, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la divulgación de la ciencia y la tecnología, especialmente la astronomía, en todas sus facetas, desde observaciones públicas hasta fotografía. Su presidente, Juanjo García, ha explicado a El Adelantado cómo se están preparando para esta lluvia de meteoros, así como otros proyectos que se están impulsando desde la Asociación.
LAS PERSEIDAS
Desde la Asociación Hespérides organizan varias actividades que ya se han asentado y que lo hacemos de forma rutinaria anual. Una de ellas, por supuesto, es la observación de las Perseidas: “Aparte de que es muy famosa, fácil de observar y confortable, aquí en El Espinar tenemos la ventaja de que en estas fechas las noches ya son frescas, pero todavía se puede estar”, señala Juanjo.
Este año, el evento de observación tendrá lugar este martes, 12 de agosto, a partir de las 22:30 horas en las gradas de la pista de deporte del IES María Zambrano, un lugar habitual para este tipo de actividades: “Está muy bien porque es un sitio muy oscuro a las afueras del pueblo y el graderío ayuda a que la gente se siente, esté cómoda y les podamos mostrar el cielo de una forma más fácil”.
La forma de organizar el evento ha ido evolucionando a lo largo de los años. Antes era una convocatoria algo más improvisada, pero desde hace unos años se viene haciendo de forma un poco más controlada para no tener problemas. Algo que no ha impedido que, en las últimas ediciones, se hayan acercado más de 150 personas e, incluso, más de 200: “Es que es algo muy familiar. Vas allí, te sientas, coges tu tumbona, tu manta, te acomodas y vas escuchando lo que te decimos. Es una forma muy agradable de pasar la noche”.
Durante la observación, la Luna estará en cuarto menguante (iluminada al 91%), por lo que no serán las mejores condiciones debido al brillo de nuestro satélite. Sin embargo, el espectacular cielo de El Espinar hará que este pequeño inconveniente no suponga un gran impedimento para disfrutar de esta lluvia de meteoros.
EL RETO DEL ECLIPSE TOTAL
Más allá de las Perseidas, desde la fundación Hespérides están atentos a cualquier fenómeno astronómico que sea digno de ver. Uno de los más esperados tendrá lugar justo dentro de un año, durante el atardecer del 12 de agosto de 2026, cuando tendrá lugar el primer eclipse total de Sol visible desde la península Ibérica en más de un siglo.
En este caso, desafortunadamente, para poder ver bien el efecto de la totalidad hay que estar dentro de una franja determinada en la península, por donde irá bajando la sombra de la Luna. Y el núcleo de El Espinar se queda justo fuera por apenas un kilómetro. Así que desde la Asociación Hespérides ya trabajan en alternativas para organizar el evento: “Estamos preparando una actividad en Riaguas de San Bartolomé, al nordeste de Segovia. Allí tenemos un convenio con su Ayuntamiento por el que gestionamos su observatorio, en el que hay un telescopio. En esa zona se va a ver perfectamente el eclipse, así que queremos preparar una actividad allí por todo lo alto”, explica Juanjo.
Eso sí, aun dentro de la franja, aún hay que buscar una ubicación precisa para que se pueda ver bien el eclipse: “Al ocurrir sobre las 20:30, el sol está a muy poquitos grados del horizonte. Y eso significa es que, a la hora de preparar esa observación, tenemos que tener en cuenta que hay que buscar un sitio elevado y con nada hacia el horizonte en el oeste. Y con ‘nada’ me refiero a ni siquiera un árbol”.
Y, además, desde la Asociación Hespérides no solo están preparando esta observación del eclipse, sino que también quieren lanzar un globo sonda a la estratosfera justo en ese momento: “Es un proyecto que nunca se ha hecho en Europa y que estamos preparando junto al Grupo de Observadores Astronómicos de Ávila (GOAA) y a la Federación de Asociaciones Astronómicas de España (FAAE). La idea es captar imágenes del disco de sol totalmente eclipsado por la luna y de esa sombra que pasa por la península”, relata ilusionado Juanjo.
EL CAME
Y, siguiendo dentro de lo que es la observación astronómica, el proyecto más reciente de la Asociación Hespérides, en colaboración con el Ayuntamiento de El Espinar y la Diputación de Segovia, es el Complejo Astronómico Municipio de El Espinar (CAME). Se trata de un pequeño mirador estelar situado en una finca municipal llamada Cañadas Hondas, cuya entrada se encuentra en el kilómetro 10.5 de la carretera SG-500. Se trata del punto más oscuro del municipio, por lo que el lugar ofrece un cielo de muchísima calidad.
“Es una caseta a modo de refugio sin telescopio u otros instrumentos de valor, pero sí tiene unas instalaciones básicas y mínimas para que los aficionados que ya están viniendo desde Madrid y Ávila bueno puedan tener un sitio nivelado donde poder dejar sus propios telescopios y hacer observaciones”, subraya el presidente de la Asociación.
Eso sí, el proyecto del CAME consta también de otra parte en la cual aún se están dando los primeros pasos. Se trata de un observatorio que se ubicaría detrás del Instituto de El Espinar y que contaría con dos cúpulas con sendos telescopios, uno para observar el sol, otro para observación nocturna: “Este edificio va a estar más destinado al astroturismo. Es decir, a diferencia del CAME, el objetivo es que allí se realicen actividades para el público general, es decir, gente que no tenga telescopios, pero que sientan curiosidad por ver la luna, el sol, las estrellas y las galaxias desde un sitio estable”.
Este proyecto es solo un paso más para seguir convirtiendo a El Espinar en un lugar de referencia para la observación del cielo nocturno, no solo a nivel provincial, sino a nivel nacional. Y es que Segovia tiene una privilegiada ventana al espacio y no podemos pasarla por alto.
