Vacío. Ha pasado una semana y el mundo de los toros -y del arte- está desamparado. Sin ídolo activo, solo queda memorar que “cualquier tiempo pasado fue mejor” porque no se era consciente del presente, y elevar al nivel de leyenda terrenal al torero más completo de la historia y al artista contemporáneo más importante en cualquiera de sus vertientes. Morante archivó su toreo para los anales. Un toreo de biografía oceánica que no solo hizo despertar la Tauromaquia del letargo en tiempos convulsos sino que trascendió a jóvenes y mayores como la senda que debe trazar en el futuro. Rescató suertes, las ejecutó como nadie e imprimió una esencia especial entre el romanticismo y el clasicismo. Maestro de la improvisación con lienzos efímeros. Único. El último ídolo. Inalcanzable. Su marcha supone un ayuno de arte sin ganas de hambre. Un adiós sin premeditación que lo eleva al olimpo del toreo, mientras el escalafón, sin demerecer a nadie, queda congelado en un erial.
El legado del diestro sevillano, manantial de fuentes que beben desde Juan Belmonte a su admirado José Gómez ‘Joselito el Gallo’, quedará guardado en la nube digital con letras de oro, pero lo cierto es que se traduce en vértigo, pues la estela del genio de La Puebla del Río es de distancia infinita. A ver quién se pone a torear ahora. Y aunque vienen jóvenes con ganas y pidiendo paso, la verdad es que el escalafón está huérfano de heredero. Tan solo una rivalidad verídica entre los también sevillanos Juan Ortega y Pablo Aguado podría menguar el vacío artístico que deja Morante; pues con el taquillero Roca Rey sin querer entrar en guerras con nadie en el ruedo y con figuras instaladas en el acomodo durante varios lustros e incluso décadas como Sebastián Castella, José María Manzanares, Miguel Ángel Perera, Alejandro Talavante y Emilio de Justo, cuya máxima aspiración es torear un viernes -día estadístico por excelencia de la juventud en los tendidos- en Las Ventas, la próxima temporada se atisba parca en alicientes, a la espera de encomendar ardua tarea a promesas como Marco Pérez u Olga Casado, en un escalafón en el que la consideración estriba en nombres como Diego Urdiales, Daniel Luque y Borja Jiménez, con la vista puesta al relance de Jesús Martínez ‘Morenito de Aranda’, Fortes, Juan de Castilla o Víctor Hernández, entre otros; y jóvenes de reciente alternativa como Roberto Martín ‘Jarocho’, Samuel Navalón, Sergio Rodríguez, Alejandro Chicharro o Javier Zulueta. El erial se verá en los carteles de la próxima Feria de San Isidro, donde, si el productor Simón Casas no se saca alguna de sus ocurrentes exclusivas, el relleno de tantas tardes será a golpe de un carrusel de confirmaciones, que si este año ha llegado a la veintena, el siguiente alcanzará una cifra similar. Ahí queda el reto de honrar la inmensa senda de Morante de la Puebla.

Las diez tardes de Morante en la provincia: la faena de rabo de Cantalejo y el toreo a la verónica en Segovia
José Antonio Morante (La Puebla del Río, Sevilla, 1979), artísticamente conocido como Morante de la Puebla, tomó la alternativa el 29 de junio de 1997 en Burgos, con César Rincón con padrino y con Fernando Cepeda en labores de testigo. Tras la ceremonia pasó a formar parte del primer escalafón donde pronto comenzó a encadenar contratos para emprender una meteórica carrera, pese a su por entonces juventud, en una época en la que otros toreros emergentes como Julián López ‘El Juli’, Miguel Abellán o Eugenio de Mora también compartían carteles con las figuras consagradas de finales del siglo XX.
El debut de Morante como matador de toros en la provincia fue en La Lastrilla a penas dos meses con 17 años, después de cumplimentar el trance de la alternativa. Fue el 24 de agosto de 1997, un contrato que se cerró tras ser declarado novillero triunfador de la temporada 1996, tras pasar por plazas segovianas como Cantalejo y Sepúlveda. El premio se entregó en diciembre de aquel año en el restaurante ‘El Mirador de La Lastrilla’, donde ya se estrecharon contactos con su apoderado de aquellos tiempos, Miguel Flores. Finalmente, el cartel se compuso con el rejoneador Luis Valdenebro y el también sevillano Franco Cardeño, en una tarde de escaso contenido en la que se lidió un astado de Domínguez Calle y cuatro de Jódar y Ruchena.

La faena más recordada de Morante en cosos segovianos fue en Cantalejo en el año 2010 cuando llegó a cortar un rabo a un ejemplar de Sánchez Arjona. ‘¡Qué suerte tienes, Cantalejo’, llegó a titular el medio especializado Mundotoro o ‘El arte y la torería de Morante cautivó al público’, resumió el crítico Pablo Pastor para El Adelantado de Segovia. Una borrachera de toreo caro.
Sin embargo, en Segovia capital, salvando la última vez que pisó el albero del coso bicentenario, sus actuaciones fueron discretas e incluso fueron pitadas por el pública en más de una ocasión. Cuatro veces -2000, 2005, 2018 y 2021- actuó el diestro de La Puebla del Río en la ciudad castellana y solo cortó una oreja en 2021, cuando dejó una faena de quilates efímeros, principalmente con el capote.
A lo largo de su trayectoria como integrante del primer escalafón también toreó en Cuéllar en 2001 y 2003, donde paseó un trofeo; y en El Espinar en 1999, donde salió en hombros tras cortar dos apéndices junto a Juan Antonio Ruiz ‘Espartaco’ y José Tomás. ‘El triunfo del toreo en El Espinar’, tituló Pastor en El Adelantado, en un festejo que resumió como “un hecho taurino glorioso con una corrida de toros histórica”.
Después, Morante regresó al coso espinariego en 2003, con balance de una oreja. En total unna decena de corridas en la provincia, entre las que sin un rédito numérico relevante destacaron ‘la faena del rabo’ de Cantalejo y el torero a la verónica en Segovia capital en 2021.

Las diez corridas de Morante en Segovia
- SEGOVIA
- 29/06/2021 Segovia. Toros de Garcigrande y Domingo Hernández Martín para Morante de la Puebla (silencio y oreja), Joaquín Galdós (dos orejas y dos orejas), Juan Ortega (aplausos y ovación)
- 30/06/2018 Segovia. Toros de Núñez de Tarifa (Antes Benjumea) para Morante de la Puebla (silencio y pitos), Alejandro Talavante (dos orejas y oreja), José María Manzanares (silencio y dos orejas)
- 29/06/2005 Segovia. Toros de Javier Pérez-Tabernero Sánchez, Juan Pérez-Tabernero Martín y Juan Pedro Domecq para El Fandi (oreja y oreja), El Juli (ovación y ovación), Morante de la Puebla (pitos y silencio)
- 24/06/2000 Segovia. Toros de Toros de El Torero para Finito de Córdoba (pitos y ovación), Morante de la Puebla (pitos y ovación), El Juli (oreja y oreja)
- CUÉLLAR
- 03/09/2003 Cuéllar . Toros de Aldeanueva para Finito de Córdoba (ovación y ovación), Matías Tejela (oreja y oreja), Morante de la Puebla (ovación y oreja)
- 27/08/2001 Cuéllar (Segovia) España – Toros de Diego Puerta Diánez para David Luguillano (ovación y dos orejas), Morante de la Puebla (ovación y ovación), Finito de Córdoba (oreja y oreja)

- EL ESPINAR
- 16/08/2003 El Espinar . Toros de Victoriano del Río Cortés para Morante de la Puebla (oreja y ovación), Finito de Córdoba (ovación y oreja), José María Manzanares (silencio y ovación)
- 21/08/1999 El Espinar. Toros de Domingo Hernández Martín y Garcigrande para José Tomás (oreja y dos orejas y rabo), Espartaco (silencio y dos orejas), Morante de la Puebla (oreja y oreja)
- CANTALEJO
- 18/08/2010 Cantalejo. Toros de Sánchez-Arjona para Morante (ovación y dos orejas y rabo), Uceda Leal (oreja y ovación), Miguel Ángel Perera (oreja y ovación)

- LA LASTRILLA
- 24/08/1997 La Lastrilla . Un novillo de Domínguez Calle y cuatro toros de Jódar y Ruchena para el rejoneador Luis Valdenebro (pitos) y los toreros Franco Cardeño (oreja y silencio) y Morante de la Puebla (silencio y ovación).
