El equipo de Gobierno del Partido Popular en la Diputación Provincial sacó adelante este jueves su propuesta del Presupuesto para 2025, por valor de 90.090.000 euros, tras una votación favorable de todos los diputados del grupo popular, la abstención del representante de Vox y la postura en contra del PSOE e Izquierda Unida (IU). Pese a que las tres formaciones de la oposición presentaron enmiendas a los presupuestos presentados por el equipo de Gobierno, no prosperó ninguna. Durante la sesión plenaria correspondiente al mes de diciembre, también se autorizó el presupuesto del organismo autónomo Prodestur y algunas modificaciones puntuales de la Relación de Puestos de Trabajo de la institución provincial.
En cuanto al debate del Presupuesto, comenzó la intervención el presidente, Miguel Ángel de Vicente, quien dio a conocer el documento haciendo una comparativa con las primeras cuentas que elaboró para 2020, respecto a las cuales se han incrementado en un 50%, más de 30 millones de euros que «se traduce, inexorablemente, en un aumento significativo de recursos destinados a Segovia, a nuestra provincia, a nuestro territorio y a nuestra gente». Además, De Vicente contextualizó sus años de Gobierno en las crisis derivadas de la pandemia, guerras en el propio continente y fuertes tensiones inflacionistas que, como al resto de ciudadanos, «han obligado a la Diputación a pagar más caro, lo que sumado a la necesidad de hacer frente a un relevo generacional en puestos estratégicos del capital humano ha supuesto un importante coste económico de planificación y de gestión que, considero, hemos gestionado desde este equipo de Gobierno con muy buena nota».
En este punto, el presidente quiso repasar algunos de los «hitos» conseguidos como las inversiones del PAIMP que han subido un 61% hasta los 6,6 millones de euros, el Plan de Caminos que se ha multiplicado por tres hasta alcanzar los 600.000 euros, la inversión en carreteras que se ha duplicado de 1,5 a 3 millones de euros, los 5,8 millones destinados al Plan de Depuradoras, junto a la Junta de Castilla y León y los ayuntamientos; o los 4,2 millones destinados al Plan Extraordinario de Sostenibilidad y Eficiencia procedente de los recursos obtenidos por la enajenación de acciones de la mercantil Urbanización Quinta Real S.A. y que está permitiendo, en colaboración con los ayuntamientos, inversiones de más de seis millones.
Pero las nuevas líneas de inversión no acaban aquí, sino que el Presupuesto de 2025 «continúa abriendo actuaciones inversoras que se prolongarán en años sucesivos, en colaboración con la Junta de Castilla y León», y así mencionó los dos nuevos planes de abastecimiento de agua o el plan de vivienda para jóvenes, la transformación de las residencias en unidades de convivencia, el Acuerdo Marco de Servicios Sociales con la Junta de Castilla y León que ha pasado de 5 a 9,4 millones o el Plan de Empleo para ayuntamientos que se ha duplicado en los últimos años hasta alcanzar los 1.750.000 euros. De Vicente tampoco obvió la puesta en marcha del Servicio Provincial de Bomberos que contará con dos millones en este Presupuesto, «sin detraer inversión presupuestaria en el resto de las áreas y servicios, incluso incrementando la dotación con la que cuentan cada año».
Enajenación de acciones de Quinta Real
De Vicente aclaró que «existe un hecho acaecido en el periodo que estamos analizando cuyo impacto presupuestario tiene una gran relevancia». Se trata de la enajenación de las acciones que tenía en su propiedad la Diputación de Segovia de la Sociedad, Urbanización Quinta Real, S.A. y que ha supuesto un ingreso de aproximadamente 11.600.000 euros. De Vicente explicó que «hemos apostado por la dosificación de esas cantidades en varios presupuestos con el objetivo de no caer en la inestabilidad presupuestaria y por no vaciar el cargador de golpe, es decir, creemos que lo sensato es ir utilizando los fondos atendiendo a razonables y no ilusorios ritmos de ejecución, lo que además permite no solo disponer de recursos ahora, sino también contar con ellos como fuente de financiación para inversiones futuras».
Reducción del endeudamiento
El presidente incidió en la apuesta por reducir el endeudamiento, pues «entendemos, por principios y ADN que la responsabilidad de gobierno exige administrar el dinero público de tal modo que se presten servicios eficientes y de calidad a los ciudadanos que redunde en mejorar sus condiciones de vida y, a su vez, procurar salud financiera para las instituciones que tienen que prestar esos servicios, pues malgastar y dejar las instituciones como un erial no está en nuestro catálogo». De Vicente no negó que «lo hacemos por ideología, pero también por responsabilidad y, por eso, no pediremos ni un euro a los bancos, es decir, no acudiremos a crédito». Con todo esto, concluyó «buscamos hacer más que nunca por nuestra provincia compatible con sanear la institución».
Enmiendas al Presupuesto y debate
Antes de salir adelante la propuesta presupuestaria, se debatieron y votaron las enmiendas que presentaban tanto el PSOE, como Vox e IU. Las tres fueron rechazadas, dando paso al debate sobre las cuentas presentadas por el equipo de Gobierno y que fueron votadas en contra por las formaciones de izquierda. Desde el PSOE, presentaron más de 30 enmiendas por valor de 5,2 millones a los para hacer realidad «otro modelo de provincia, pues no se trata de gastar más, sino de gastar mejor, priorizando lo que realmente importa a los segovianos y segovianas», tal y como expresó el portavoz, Máximo San Macario, a quien el presidente afeó que «enmienda con más ingresos que gastos, si lo aceptásemos haríamos la cuadratura del círculo y aprobaríamos un Presupuesto con superávit», refiriéndose al error de cálculo apreciado en la propuesta socialista que tenía un millón más de ingresos que de gastos.
Mientras, la representante de IU en el grupo mixto, Ana Peñalosa, criticó el destino de algunas partidas, que considera de gasto político y «opacas», para aumentar otras asignaciones que no estima suficientes, dedicar parte del presupuesto a la Memoria Histórica y que «evidencian un modelo político muy alejado de las prioridades que tenemos en Izquierda Unida». Quien se abstuvo en la votación del Presupuesto fue el representante de Vox en el grupo mixto. Pedro Varela reconoció que las cuentas «son buenas», aunque ha matizado algunas partidas con las que no está de acuerdo. Entre ellas, cantidades que se destinan de manera directa a organizaciones sociales, abogando por la concurrencia competitiva y remarcando que «quien quiera pan, que trabaje» y pidiendo la retirada de una partida dedicada a igualdad.
Por su parte, el diputado de Hacienda, Óscar Moral, argumentó que si los presupuestos son buenos obedece a que «el equipo de gobierno del PP es predecible y, por tante, fiable, a la hora de elaborar las cuentas, pues cumplimos con nuestro compromiso de reducción de deuda y aumentamos la inversión en los pueblos». El objetivo, destacó Moral, «es vivir en una provincia de la que nos sintamos orgullosos, pues a pesar de su demagogia, no reducimos ni un solo derecho social, por lo que, además de técnicamente, son política y socialmente buenos».
