Entrar en la ‘estructura’ de los siglos XVI al XIX con referencia a los conventos- hasta 25-, que tuvo Segovia, vivir su caminar de proyección, decadencia y desaparición es, opino, un mundo apasionante. Así que, concretando, busqué detalles referidos al desaparecido convento de San Agustín en la ciudad y de aquí ‘pa bajo’ los expongo.

–Fundación: año 1515. Reinaba Felipe II. Mecenas, Antonio de Guevara y Tapia, Oidor de las Reales Audiencias y Cancillerías en el Imperio español. Ubicación calle de La Rivilla, hoy jardines dedicados a los autores del Himno a Segovia: García Marcos y Martín Crespo.
-Los Dominicos, ya ubicados en Segovia en el Convento de Santa Cruz, pleitean para que no se instalen en la ciudad los Agustinos. La Chancillería no les da la razón a aquellos, avalada la decisión judicial a instancias –se dice, se oye, se comenta-, de la Gobernadora de Castilla.
-La construcción del Convento de San Agustín se alargó por 30 años (1570-1600). Si bien la iglesia fue inaugurada el 16 de noviembre de 1597.
-Fue ocupado por tropas francesas en 1808, que lo dejaron hecho unos zorros. De tal forma que desde ese momento perdió su ‘esplendor’. Unos meses después (R.D. de 18/8/1809), el Rey de España ¡tócate! José I Bonaparte, firma: ‘Se incorporarán al Estado los bienes de las órdenes religiosas disueltas o reformadas por el Gobierno’.
-Por Decreto de las Cortes Generales (17/6/1812): ‘todas las órdenes regulares, monacales, mendicantes y clericales que existen en los dominios de España quedan suprimidas. Los individuos de ellas, en el término de 15 días deberán salir de sus conventos y claustros y vestir hábitos clericales civiles’.
-En una hipotética ‘clasificación’ de bienes de los más de veinte conventos de la ciudad en aquellos siglos, el primer lugar lo ocupaba El Parral, el segundo los Dominicos de Santa Cruz y el tercero San Agustín. Entre los tres dominaban las posesiones de tierras de sembradura, viñas, prados, inmuebles… de la provincia.
–El número de frailes agustinos en Segovia fue disminuyendo de forma paulatina: año 1768=29; 1797=24: 1820=6 y 1835=3.
En los cerca de 200 años que permaneció ‘viva’ la Comunidad de San Agustín en Segovia, acumuló un ‘amplio capital’ a través de donaciones de particulares. Lo que viene a demostrar la capacidad de convencimiento, en la divulgación de la palabra de Dios, que tenían los agustinos.
-Concretando. En el año 1820, tenían el 13,44% de las tierras de sembradura en Segovia; 110 aranzadas de viñedo, 10 prados, una huerta, una bodega y varias casas. Lo descrito se situaba en Segovia (capital), Abades, Aldea Real, Armuña, Bernuy de Porreros, Fuentepelayo, Miguel Ibañez, Garcillán, Zamarramala, Fuente de Santa Cruz, Coca, Navalmanzano, Nava de la Asunción, Turégano, Basardilla, Lozoya (Madrid), Valverde… Había recibido también bienes de las fundaciones Tapia y García Albaser …
-En el año 1820, después de haber regresado al Convento tras la invasión francesa, recibió del arrendamiento de sus tierras, 411 fanegas de trigo; 328 de cebada y 57 de centeno. Las rentas que percibía anualmente en especie se realizaban en la festividad de San Bartolomé, 24 de agosto, o la del alquiler de las casas el día 29 de septiembre, festividad de San Miguel.
Un inventario… inventario
-Los agustinos, expulsados de su Casa por la ocupación francesa, fueron expulsados del convento y este quedó vacío, no sin antes realizar, por exigencia de la potencia intrusa, el inventario de los bienes. Éste se llevó a efecto en 1809 con la presencia de quien en ese momento era prior del convento, Pedro de Vicente y el catalán, de Sabadell, Jaime Amat de Palau y Pont, nombrado (30/9/1809) superintendente y administrador de Bienes Nacionales en Segovia. Su sueldo era de 203 reales.
-Llegados a 1835 con la desamortización -y otras zarandajas- de Mendizábal, y dado que para entonces el convento solo contaba con tres individuos, es decir, que no llegaba al mínimo de doce que el Decreto de exclaustración exigía, se echó el cierre y hubo que hacer otro inventario.
-Todo lo que de valor había lo vendió a través el Estado de subastas. Como ejemplo. En noviembre de 1839 adjudicó una casa en la calle San Agustín por 5.520 reales a Valentín Sebastián; por 125.000 fue adjudicada la hacienda del Convento en Fuentepelayo a Teresa Sánchez…Fue en 1853 cuando se ‘traspasa’ al estamento militar y se convierte en almacén. Luego Cuartel.
-La falta de mantenimiento lleva al derrumbe de la cubierta en el año 1893. La veleta de su torre es trasladada a la iglesia de Torreiglesias.
–Las naves del templo son demolidas en 1915. Hubo duras críticas por ello. Zuloaga, fue el mayor opositor. Pero el Gobierno, que presidía Eduardo Dato, firmó el ¡derríbese! Y se derribó.
-Curiosidad. El retablo, de estilo neoclásico, que presidía la iglesia se encuentra en la que fue convento de Santa Cruz. Hoy sede de universidad privada.
-Del padre agustino, Ismael Arevalillo, recogí el siguiente comentario en torno al convento: ‘Era grande, majestuoso, colosal y elegante. La desamortización y la exclaustración, fueron uno de los episodios más crueles e injustos de nuestra historia eclesiástica’. Amplio sí tuvo que ser, teniendo en consideración que hubieron de construirse, además de la Iglesia, alrededor de treinta celdas.
-El edificio linda con la calle Taray y a poniente con el Paseo del Obispo. A ambos lados del recinto tenía dos parcelas de tierra de sembradura.
-En 1942, El ejército abandona el cuartel. El solar de la iglesia conventual fue entregado a la Organización Sindical y a Falange Española que levantaron un hospital y el monumento a los caídos.
-Luego, pasado mucho tiempo, año 1985, lo que queda del Convento fue declarado Bien Protegido (BOE de 28/6).
No sé si lo sabrán, pero quiero que sepan ‘que todo lo que tiene un inicio, también tiene un final’.
