El Colegio Claret de Segovia volvió a congregar a los miembros de su Comunidad Educativa durante la tradicional Jornada de Convivencia en la que ayer se citaron alumnos, profesores, familias y amigos de este centro escolar con tanto arraigo histórico en la ciudad. La celebración, como cada año, acogió un fin solidario y las aportaciones de los participantes en la tradicional paellada, que superaron los 800 comensales, irán destinados a los proyectos que, durante el curso, ha venido gestionando la Fundación PROCLADE.
“Si es importante el destino de estas aportaciones para los organizadores de esta cita, no lo es menos la demostración del vínculo que se pone de manifiesto entre los diferentes partícipes de la realidad educativa en Claret”, declaran desde el colegio.
Además del aspecto gastronómico, el programa de la Jornada se iniciaba con la Celebración Eucarística en la iglesia del centro, y contempló otras actividades, aprovechando que nos encontramos en el tramo final del curso, como las exhibiciones de alguna de las extraescolares o los campeonatos intergeneracionales de tute y mus, que enfrentaron a padres e hijos.
Por su parte los más pequeños tuvieron la oportunidad de disfrutar de los castillos hinchables e incluso, en esta ocasión, se hizo coincidir el evento con el campeonato de fútbol sala, Torneo Fin de Temporada de la categoría prebenjamín, en el que tomaron parte un total de 12 equipos y 150 jugadores pertenecientes a los clubes Segosala, San Cristobal, C.P. Trescasas, Real Sitio C.F. y el C.D. Champagnat, además del C.D. Claret, organizador del trofeo.
En definitiva, la Jornada de Convivencia fue un nuevo momento de encuentro en el que se aprovechó para intercambiar impresiones, participar de acciones que favorecen la convivencia y que concluyó con la celebración de una verbena para grandes y pequeños, despidiendo el curso que, en apenas unos días, echará el telón.
