El ciclo literario sobre la poesía social que se está llevando a cabo en Fuentepelayo — gracias a la organización y patrocinio de la Fundación Caja Cega, más la colaboración del Ayuntamiento de la localidad segoviana y de Cajaviva Caja Rural— tuvo en su tercera sesión una ponencia sobre la vida y obra del poeta Blas de Otero.
La figura literaria del escritor bilbaíno “fue desmenuzada hasta límites insospechados por el ponente que, además contó con el apoyo externo ofrecido por una decena de escolares de educación secundaria recitando varios de los poemas más representativos de uno de los componentes más significativos del llamado ‘triunvirato vasco’ de la poesía social”, tal y como agregaron.
Uno de los denominadores comunes de Ángela Figuera, Gabriel Celaya y Blas de Otero (los tres nacieron en el País Vasco) también es coincidente “en el estilo de sus poesías, el vocabulario directo y sencillo que utilizan y el objetivo final de rebelarse ante las injusticias y abusos ejercidos por la dictadura franquista. Incluso se da la circunstancia de que los tres personajes murieron en Madrid”, continuaron detallando.
Juan Cruz Serrano, como presidente de la Fundación Caja Cega, fue el orador encargado de explicitar todos los aspectos de interés para los espectadores, haciendo especial énfasis en las etapas que se atisban en la creación poética de Blas de Otero. En primer lugar, se aludió a la obra ‘Cántico espiritual’ como primer poema creado por el escritor bilbaíno. Una etapa influenciada por la mística de San Juan de la Cruz y Fray Luis de León. “Una fase poco productiva en obras escritas que incluso llegó a renegar de ella el escritor. El segundo eje sobre el que gira la obra de Blas de Otero es la llamada etapa existencialista, dilucidando las diferencia entre el ‘ser’ y el ‘existir’. La fase social fue la que despertó mayor interés de los espectadores por considerarse más cercana a sus propios intereses y conocimientos”, prosiguieron.
En la parte final de la sesión, el ponente se detuvo en los dos años (1947 y 1948) en los que el poeta ejerció como profesor de literatura en la Academia de Artillería de Segovia. En este breve espacio de tiempo, Blas de Otero entabló amistades con el profesorado y con algunos de los dirigentes de la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce.
El dinamismo de la sesión también posibilitó a los asistentes la visión de sendos videos con la interpretación musical de varios de los poemas más populares de Blas de Otero, destacando ‘Me queda la palabra’ (Paco Ibáñez) y ‘España camisa blanca de mi esperanza’ (Ana Belén).
Asimismo, el presente acto contó con la presencia de los patronos de la Fundación Caja Cega, miembros del Club de Lectura ‘Pasa la hoja’, responsables de la junta gestora de la propia biblioteca y amantes anónimos de la buena poesía.
