El Centro Penitenciario de Segovia celebraba ayer la ya tradicional festividad de La Merced, con una sencilla ceremonia donde se hizo entrega de una Medalla de Bronce póstuma a la familia de un empleado fallecido, “por su compromiso y responsabilidad extraordinarios en el desempeño de sus funciones”. También se ha galardonado a los 11 funcionarios que se jubilan este año y a los seis que cumplen 25 años de servicio.
Con esta celebración, las Instituciones Penitenciarias conmemoran a su patrona en una festividad que cumple 85 años. Una fecha que, según la subdelegada del Gobierno, Marian Rueda, “debe servir para poner en valor el trabajo tan importante que realizan las personas que forman parte de nuestro sistema penitenciario; y que incluye a los empleados públicos, personal externo que participa y que colabora de una u otra manera: ONGs y entidades públicas y privadas; además de los internos que cumplen condena”.

La subdelegada, que estuvo presente en los actos de celebración, también señaló “la labor de estos trabajadores, esencial para que los internos puedan normalizar su vida, una vez cumplan con sus penas y formen parte de la sociedad y el mercado de trabajo. Sin su dedicación y compromiso diario, esta inserción de los internos en la sociedad no sería posible”.
Un 15 por ciento de las plazas, es decir, 48 de las 310 que requiere el centro, están sin cubrir
No obstante, según la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), este valioso personal se encuentra en situación de déficit. Un 15 por ciento de las plazas, es decir, 48 de las 310 que requiere el centro, están sin cubrir. En el caso de los servicios médicos, falta más de la mitad de efectivos que debería cubrir las necesidades del personal y de los 250 internos de la prisión. Según denuncia Acaip, esto ha derivado en una mayor conflictividad y un descenso en la seguridad, tanto entre los propios internos como hacia los trabajadores, de forma que durante el año 2023, se registraron hasta siete agresiones en el centro, superando de esta forma las dos registradas en 2022, mientras que en 2021, únicamente se produjo una.
A pesar de las plazas ofertadas y de los intentos por bajar la media de edad de los funcionarios, esta continúa siendo muy alta, rondando los 50 años de edad, por lo que las incorporaciones, advierte la asociación, no son suficientes para relevar a los funcionarios que se jubilan, lo que también dificulta la seguridad en el centro. A esto se une la permanencia de algunos internos en módulos especiales, que requieren una atención más personalizada que no pueden recibir debido a esta falta de personal. Para Acaip, la solución pasa por un aumento en la inversión en recursos humanos, algo que ya han reclamado a las autoridades.
FOMENTO DE LA REINSERCIÓN
A pesar del repunte de la conflictividad en el centro, durante la festividad también se ha querido remarcar el compromiso de los internos por lograr la reinserción en la sociedad, ya que prácticamente todos participan en talleres ocupacionales, cursos formativos y actividades lúdicas que ofrece el centro. Así, entre los cursos impartidos, se encuentran el de Jardinería, Confección Industrial, Carretillas Elevadoras, Manejo de Transpaletas y Manipulador de Alimentos.
Desde el Taller de Confección Industrial, en el que han participado 13 internos, se está distribuyendo el nuevo uniforme a más de 21.000 funcionarios de los 84 centros penitenciarios de todo el territorio español. En el Centro Penitenciario también están en marcha diversos talleres propios que ofrecen a los internos la posibilidad de realizar un trabajo remunerado y adquirir habilitades útiles para su futura inserción en la sociedad, tales como actividades auxiliares en biblioteca, limpieza, comedor, enfermería, gestor de residuos, lavandería, jardinería, socorrista o peluquería; responsables de la alimentación, venta en el economato; mantenimiento, en tareas relacionadas con electricidad, fontanería o carpintería; y producción diaria de pan y bollería para su consumo en los centros. Tanto esta labor como la de preparación de alimentos, han comenzado este año a realizarse también en Ávila.
Además, sigue en funcionamiento el Taller de Call Center, en el que los internos adquieren habilidades en atención al cliente y gestión de llamadas. Alrededor de 120 internos participan en este tipo de cursos mientras que un total de 90 participan en programas de formación reglada. Se ha impartido Educación Primaria y Secundaria (CEPA Antonio Machado), Secundaria y Bachillerato (IES Andrés Laguna), estudios universitarios (Uned) y FP (IES Jorge Manrique de Palencia).
Un total de 73 internos realiza trabajos en beneficio de la comunidad, gracias a la colaboración de los ayuntamientos de la provincia, por lo que Marian Rueda anima “a todos los ayuntamientos de la provincia a seguir participando en estos programas, que permiten que ambos se beneficien y se haga un doble servicio a la sociedad”.
Asimismo, la subdelegada ha dado especial valor a la labor del Centro de Integración Social (CIS), el espacio previo a la libertad, “que da continuidad al sistema, y que permite la adaptación de los penados, antes de conquistar la libertad plena”, una labor que “es indispensable para los internos y su futuro en libertad”.
OTRAS ACTIVIDADES
Además de los actos que se llevaron a cabo durante la jornada de ayer, Rueda anunció que mañana tendrá lugar una mesa redonda sobre la importancia de la Educación en el Centro Penitenciario, en la que estará presente la subdelegada. Posteriormente tendrá lugar una jornada de formación e inauguración de un Punto Violeta en el Centro. Ambas actividades se encaminan de esta manera a fomentar la conciencia social de los internos, del mismo modo que ya se hace en numerosas actividades en colaboración con la Biblioteca de Segovia, el Hay Festival, Titirimundi o en centros educativos. También a través de las colaboraciones habituales en proyectos solidarios con diferentes organizaciones como Cruz Roja, Amanecer, Horizontes Abiertos, la Asociación de Alcohólicos Rehabilitados de Segovia o la Fundación Real Madrid, entre otros, o relacionadas o pertenecientes a la Iglesia, como Cáritas.
ACTIVIDADES LÚDICAS PARA FOMENTAR LA SENSIBILIZACIÓN
Según la subdelegada del Gobierno en Segovia, Marian Rueda, “Las actividades lúdicas o deportivas son esenciales para la relación entre internos, su desarrollo físico y mental, que serán fundamentales para una mejor reinserción social; al igual que la adecuada oferta formativa, será fundamental para su reinserción laboral”.

Con la idea de apoyar este principio, el Centro Penitenciario realiza diversas actividades en colaboración con entidades solidarias, entre las cuales destacan Cruz Roja, Amanecer o la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos, que se encarga del Proyecto Loyola para el tratamiento de drogodependientes. La colaboración de CaixaBank y la Fundación Torreón de Lozoya es fundamental para la realización de este proyecto, en el que se promueve el apoyo a colectivos en riesgo de exclusión social, así como contribuir al desarrollo local. Esta última es también la encargada de promover cada año desde 2012, la participación de un grupo de internos en la ruta de peregrinación del Camino de San Frutos, que se lleva a cabo durante el mes de octubre, coincidiendo con la festividad del santo. Durante el camino se trabajan las habilidades, los valores y los recursos que necesitan para afrontar la vida en libertad y poder reinsertarse de nuevo a la sociedad.
Uno de los aspectos que se puso en valor durante la última peregrinación, fue el apoyo al papel de la mujer en el mundo rural, donde mujeres que viven y trabajan en los pueblos de la provincia, compartieron con el grupo de peregrinos sus experiencias, y sus dificultades en su día a día.
Otros programas destacados que buscan sensibilizar a los internos e inculcarles diversos valores para el día a día, son los talleres de habilidades sociales de Cáritas Segovia, los de meditación-relajación de M.A Segovia, que en muchos casos ayudan a controlar la impulsividad en los participantes; o las Escuelas Deportivas de Fútbol y Baloncesto en colaboración con la Fundación Real Madrid, que fomentan la colaboración y el trabajo en equipo entre los internos participantes.
Además, algunos de los reclusos han tenido posibilidad de participar en talleres de lectura, han asistido a proyecciones de películas y cuentacuentos, fomentando así el uso de la cultura como vehículo para mejorar sus habilidades sociales .
