La búsqueda de financiación es uno de los grandes desafíos a los que se deben enfrentar las empresas en su día a día. Con independencia de que estemos comenzando una actividad, o ya llevemos un tiempo y queramos crecer a un mayor ritmo, encontrar una vía de financiación que se adecúe a nuestros intereses y que sea compatible con nuestro negocio es poco menos que una misión imposible.
Pese a que en la mayoría de los casos, todos pensamos que acudir a una entidad bancaria es una de las mejores opciones por las que podemos decantarnos para conseguirlo, la realidad es que los trámites burocráticos que encontramos en este tipo de peticiones, unido a la cantidad de tiempo que requieren las entidades para poder ofrecer una respuesta, se convierten en los dos principales elementos a evitar. Un escenario que hace que el capital privado se haya convertido en la vía de financiación más popular que podemos encontrar en la actualidad.
El crecimiento de la financiación privada en el entorno empresarial
Los préstamos de capital privado son, como ya hemos mencionado, una de las vías de financiación más interesantes y populares que podemos encontrar en la actualidad. Se trata de una opción que es muy interesante tanto para particulares como empresas que necesitan de una cierta liquidez, pero no pueden acudir a las acciones tradicionales, o en el caso de poder, no tienen el tiempo suficiente como para esperar todo lo que este tipo de vías requieren.
Uno de los grandes secretos de su éxito lo encontramos en la flexibilidad. Y es que, al contrario de la financiación tradicional, en este caso las personas y empresas que prestan este dinero son conscientes de la complejidad que resulta poder obtener el retorno adecuado de él en un corto espacio de tiempo. Por lo que podemos pactar un tiempo de devolución más largo de lo que encontraríamos en las vías tradicionales. De este modo, podremos obtener la máxima rentabilidad posible en torno a la inversión realizada.
Un trámite 100% online y regulada
La financiación privada permite conseguir la liquidez que necesitamos para emprender un nuevo proyecto de manera 100% online, por lo que evitamos los clásicos desplazamientos físicos que debíamos realizar hace algunos años y que no garantizaban el poder acceder a los soldados que estábamos buscando.
El hecho de que se trate de una vía alternativa, no quiere decir que no esté 100% regulada. La cantidad prestada queda reflejada en el contrato pertinente, junto con las condiciones de devolución, para que no tengamos ningún problema durante todo el proceso en el que se realiza el préstamo. Además, se trata de un proceso muy sencillo que únicamente requiere del envío de documentación, el estudio y la aprobación del préstamo en función de los datos aportados, y la firma final.
Como podemos comprobar, se trata de una de las mejores opciones que tenemos actualmente a nuestra disposición y que nos permite acceder a una vía de financiación que hace algunos años era imposible de alcanzar.
