Con la calculadora en la mano y, salvo hecatombe, el Balonmano Nava tiene prácticamente sellada su presencia la próxima temporada en la Liga Asobal. Y es que, pese a su última derrota en el Vicente Trueba ante Torrelavega y, a falta de cinco jornadas para el cierre del campeonato, el equipo de Álvaro Senovilla marcha en la novena posición de la clasificación con 22 puntos en su casillero, es decir, ocho por encima tanto del descenso como de la promoción de descenso con únicamente diez puntos por disputarse.
Teniendo en cuenta el golaverage particular con los tres últimos clasificados, el Viveros Herol tiene perdida dicha ecuación con Helvetia Anaitasuna, mientras que se lo tiene ganado a Bada Huesca y, frente a BM Guadalajara, aún está en el aire aunque el viento sopla a favor segoviano ya que, con el encuentro de vuelta aún por disputarse, el Balonmano Nava se impuso en el choque de ida disputado en el Guerreros Naveros por una diferencia de seis goles.
De esta manera, el conjunto navero, siempre y cuando Anaitasuna, Bada Huesca y Guadalajara sumen los últimos cinco encuentros por victoria, necesita de tres puntos en las últimas cinco jornadas para certificar la permanencia sin tener que atisbar resultados de rivales.
Y la primera oportunidad de oro para el Balonmano Nava llegará a partir de este mismo sábado cuando, a partir de las 18:30 horas, reciba en el pabellón Guerreros Naveros la visita de un Frigoríficos Morrazo que es undécimo clasificado, a cuatro puntos de los segovianos.
